Maluma tuvo siempre un futuro lejano a los escenarios. Incluso era una locura de niño por parte de sus padres que ese fuera su destino. El pequeño niño dedicó muchos años de su vida a entrenar para ser futbolista, se preparó e hizo todo lo que tuvo a su alcance para dedicarse a jugar a la pelota. Pero la vida siempre trae sorpresas.
‘Papi Juancho’ nació y creció en Medellín, Colombia. Desde muy chiquito empezó a jugar al fútbol, de hecho le dedicó ocho años de su vida a este deporte. Asistió a la escuela “El Retiro”, en donde comenzó a mostrar su pasión por la música, tanto cantar como escribir. De hecho, era el encargado de escribir las cartas de amor que sus amigos les entregaban a sus novias.
A los 15 años compuso la canción ‘No quiero’ y su tío fue ahí que, viendo su pasión por la música, le ofreció como regalo de cumpleaños grabar la canción en un estudio profesional. Luis Londoño, el padre del cantante, se oponía a que el adolescente abandonara el deporte ya que sentía que podía llegar a convertirse en una estrella. En cierto punto tuvo razón, si se convirtió en una súper estrella pero no del deporte sino de la música.
Un año después, con 16 aniversarios, comenzó a recibir clases de canto mientras cursaba su último año de bachillerato. Fue en ese momento que Juan Luis Londoño Arias se transformó en Maluma y se lanzó al estrellato.
En la actualidad, Maluma rompe los escenarios, es una de las voces más populares y bailadas del momento y en ocasiones, regresa a la práctica deportiva con sus amigos que lo apoyaron con los estudios musicales, mientras ellos seguían corriendo diferentes estadios.