En tiempos electorales recientes, la frase "voto por voto, casilla por casilla" se ha convertido en un símbolo emblemático en la defensa de la democracia y la transparencia de resultados en México. Esta consigna, resuena en la memoria colectiva desde hace décadas y si bien prácticamente todos los mexicanos han escuchado o gritado esta frase, su origen habitualmente es pasado por alto.
La historia detrás de este eslogan político apartidista y de corte democrático tiene sus inicios en las elecciones presidenciales de 2006, un proceso electoral que marcó un hito en la historia política del país, a pesar de que los comicios de 2024 fueron los más grandes que ha presenciado la nación, la jornada electoral de mediados de los 2000 dibujó el rumbo de la República de manera significativa y sus consecuencias aún son relevantes para México.
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¿De dónde viene el grito "Voto por Voto"?
El contexto que dio origen a esta frase se remonta a las elecciones presidenciales del 2 de julio de 2006. En esos comicios, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), entonces candidato del Partido de la Revolución Democrática (PRD), denunció un presunto fraude electoral y exigió un recuento total de los votos. Los resultados oficiales fueron extremadamente cerrados, situando a Felipe Calderón del Partido Acción Nacional (PAN) y a AMLO en un casi empate.
Tras casi 60 días de incertidumbre, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) emitió su dictamen, declarando a Felipe Calderón como presidente de México por una diferencia del 0.58%. Este resultado generó una serie de protestas en la Ciudad de México (antes Distrito Federal) los días 8, 16 y 30 de julio de 2006.
¿Por qué se popularizó la frase "Voto por Voto"?
En respuesta a los resultados y buscando defender la voluntad popular, López Obrador y sus simpatizantes popularizaron la frase "voto por voto, casilla por casilla". Este lema se convirtió en un llamado a la transparencia y a la justicia electoral, simbolizando la resistencia contra el fraude electoral. La frase se consolidó como un emblema de la lucha por la democracia en México.
Desde las elecciones de 2006, "voto por voto, casilla por casilla" ha trascendido su contexto original y se ha convertido en un referente en la defensa de la democracia en México. Ha sido utilizado en diversas manifestaciones y protestas ciudadanas, exigiendo elecciones limpias y transparentes en distintos niveles de gobierno. La frase encapsula el deseo de los ciudadanos de asegurar que cada voto sea contado y respetado.
La eterna lucha por la democracia en México
En un país donde la historia electoral ha estado marcada por la sospecha y la desconfianza, esta consigna sigue siendo un recordatorio poderoso de la importancia de la participación ciudadana y la vigilancia constante para proteger los principios democráticos.
La historia de "voto por voto, casilla por casilla" no solo nos recuerda un episodio crucial de la política mexicana, sino que también inspira a futuras generaciones a seguir luchando por una democracia plena y transparente.