Junto con el centenario de Rosario Castellanos, dice la investigadora Sara Poot (Mérida), este año también se recuerda a quien propició "una comunidad" entre las mujeres de su época: Sor Juana Inés de la Cruz, en el 330 aniversario de su fallecimiento.
Mientras vivió la monja jerónima el feminismo no existía, pero Poot afirma que "sí hay una conciencia de ser mujer: ella lo dice en sus poemas, habla de su condición femenina, habla desde la ironía, desde un llamado feminismo, por qué no decirlo así, que promueve, que promulga, que habla de la libertad del conocimiento, de la libertad de la búsqueda".
Previo a la conmemoración, la investigadora coordina Carísimas Hermanas y doce diálogos actuales (Vaso Roto, 2024), ejemplar que parte del célebre Primero sueño, publicado en 1692 ,y que busca entablar un diálogo con otro libro en torno a Las moradas de santa Teresa de Jesús, también publicado por Vaso Roto.
"El acierto mayor es imaginarnos un libro frente al otro, la relación de lectura y escritura de una y otra monja, la relación de estas monjas con lo cotidiano", considera. Pero más allá de la propuesta conjunta, el libro propone lecturas en torno a la 'comunidad' de mujeres entre las que se movió Sor Juana.
"Nuestra gran pensadora hace una genealogía de mujeres, antes de ella y de su época, hace toda una relación de mujeres importantes en la mitología, en la historia, en la cultura, en la literatura, en otras artes, es muy importante la ristra de mujeres que menciona".
Además de la reproducción de las páginas originales de Primero sueño, el poema sorjuaniano más largo con 695 versos, aparecen textos de Patricia Saldarriaga, Verónica Grossi, Asunción Lavrin, Beatriz Colombi, entre otros autores. En general, dice Sara Poot, "Sor Juana trasciende en las letras, en el pensamiento, en la educación, incluso, en la economía".
PAL