Las criptomonedas no están exentas al nerviosismo por la alta inflación y una posible recesión económica, coincidieron los especialistas.
El Bitcoin, la criptomoneda con mayor valor en este mercado, tan sólo durante la sesión del sábado, registró una caída de 74 por ciento, al ubicarse en 18 mil 242.3 dólares, su nivel más bajo desde noviembre pasado, cuando alcanzó su máximo histórico, de más de 67 mil dólares, refirió Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Grupo Financiero Base.
Este fin de semana se ubicó por debajo de 20 mil dólares, nivel no visto desde diciembre de 2020, y luego de la caída de 15 por ciento del lunes pasado, agregó.
Al 17 de junio de este año, las principales criptomonedas, de acuerdo con su valor de mercado, registraron pérdidas promedio superiores a 600 por ciento.
El Bitcoin, del cierre de 2021 al 17 de junio, retrocedió 557.91 por ciento; Ethereum bajó 704.96; Cardano cayó 628; Binance Coin descendió 583.95 por ciento; y XRP retrocedió 613.34 por ciento.
También perdieron en ese periodo Solana, con 822.05; Dogecoin, con 665.71; Polkadot, con 726.48; TRON, con 205.88; y Wrapped, con 558.79 por ciento.
Christian Pérez Carreto, vicepresidente de la Comisión de Tecnologías Financieras Emergentes del Colegio de Contadores Públicos de México, refirió que a pesar de que los fundamentales de las criptomonedas son diferentes, la realidad es que toda la “paranoia” del mercado afecta de igual manera a todos los mercados variantes.
Dijo que a pesar de que el mercado cripto tiene sustentabilidad suficiente para sobrevivir, hay especuladores en este mercado y son los que causan las caídas, ocasionando ventas o compras desmedidas.
Partiendo entonces, expresó, de que son los especuladores los que están moviendo al mercado, la regla general económica indica que al tener inflaciones altas y aumentos de tasas de interés, con este panorama, todos los capitales de riesgo se están saliendo y están dirigiéndose a instrumentos más seguros.
De ahí la caída de los mercados de valores, de derivados y de las criptomonedas, de las cuales están saliéndose los especuladores, para dirigirse a instrumentos de bajo riesgo, como son los bonos gubernamentales.
CAR