Para 2022, el presupuesto federal requiere al menos 500 mil millones de pesos adicionales para enfrentar las necesidades de gasto que generó la pandemia en materia de salud y educación, así como otros “graves problemas” que tiene el país, entre ellos la falta de inversión para impulsar la recuperación económica, consideró Alfonso Ramírez Cuéllar, coordinador del Grupo de Trabajo para la Transición Hacendaria en la Cámara de Diputados.
“Estamos hablando de dos puntos del PIB para enfrentar los nuevos desafíos que se abrieron con motivo de la pandemia y las carencias que se agravaron por la crisis económica”, expuso.
En entrevista con El Heraldo de México, comentó que, de acuerdo con análisis que han llevado a cabo, existe margen para recaudar ese monto a partir de mayores esfuerzos para combatir la evasión de impuestos en el tema de facturas falsas y las planeaciones fiscales agresivas.
“Además, llegó el momento de que los multimillonarios, los que toman y los que fuman hagan un mayor esfuerzo para colaborar”, expresó.
También dijo que se debe acabar con la regresividad que representan algunos esquemas impositivos, porque afectan a la población de bajos ingresos y la clase media; revisar la estructura de gastos fiscales y generar una mayor corresponsabilidad de estados y municipios en materia de ingresos.
El legislador de Morena llamó a no escatimar esfuerzos, porque después va a salir más caro al país. “Lo más grave sería enfrentar una situación tan difícil desde el punto de vista económico y sanitario con una inercia como si estuviéramos en tiempos normales”, planteó.
Los requerimientos presupuestales que tiene el país superan lo que el Servicio Administración Tributaria (SAT) espera recaudar (200 mil millones de pesos) con la miscelánea fiscal que va a presentar el próximo 8 de septiembre.
En materia de salud, señaló que se debe crear un fondo para enfrentar ésta y futuras pandemias. También debe haber mayor presupuesto para mejorar las condiciones de trabajo del personal hospitalario y fortalecer los institutos y los nosocomios nacionales.
En educación debe haber una fuerte inversión para fortalecer la infraestructura de las escuelas y crear programas emergentes para atender el rezago escolar que generaron las clases a distancia y reintegrar a los miles de niños y jóvenes que abandonaron sus estudios, sostuvo el legislador.
PAL