Ricardo Sheffield, titular de la Procuraduría Federal del Consumidor, aseguró que el oxígeno en el país llega a la población gracias a tres empresas nacionales y a algunas internacionales; sin embargo, explicó que la falta de recipientes para almacenar este recursos ocasiona un problema para los enfermos de coronavirus.
Destacó que el vender los cilindros en los que se transporta esta sustancia es un delito, por lo que la Policía Cibernética está investigando para detener a las personas que incurren en esta práctica.
“El problema es que muchas personas están guardando los cilindros en sus casas”.
Explicó que el acaparamiento de estos insumos pone en riesgo la vida de las personas que necesitan de estos objetos para contener las complicaciones derivadas de la enfermedad surgida en Asia.
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En entrevista con Salvador García Soto, el funcionario dijo que la dependencia está recibiendo denuncias de la población para que se actúe en contra de quien está abusando de la situación.
Aseguró además que se está actuando en contra también de las funerarias y de quien vende oxígeno y contenedores de esta sustancia a sobreprecio, por lo que pidió que se reporten estos actos.
Durante los últimos días se ha reportado la escasez de los recipientes para almacenar oxígeno, lo cual pone en entredicho el abasto para las personas que lo necesitan.