La Fórmula 1 es uno de los deportes más bellos para ver; sin embargo también es uno de los peores para practicar, no solo por la dificultad para poder conseguir un asiento sino que salir ileso de una carrera era muy complicado en los primeros esbozos de la Fórmula 1 por lo que el caso Lauda es muy recordado.
Y es que Niki Lauda sufrió el peor de los accidentes que ha habido en el mundo del automovilismo, pues no solo marcó un antes y un después en el mundo de las carreras de Fórmula 1, sino que también marcó una pérdida personal para el piloto pues su vida no volvió a ser la misma.
1976 fue un año complicado para lauda pues competía por el campeonato junto a James Hunt, con 58 puntos y 35 unidades, además de una fuerte presión por parte de su escudería McLaren pues necesitaban conquistar el título de ese año a costa de lo que fuera en esa temporada.
El circuito de Nurburgring tenía 22 km de longitud, mismo que ese terrible 1 de agosto de 1976 recibió a los pilotos con lluvia, algo que siempre es complicado y peligroso de manguera para los pilotos de este deporte, por lo que tuvieron que salir con neumáticos especiales.
El día que la vida de Niki Lauda cambio por un choque en la Fórmula 1
La dificultad de la lluvia hizo que la mayoría de pilotos saliera con neumáticos especiales para no patinar con los monoplazas en la pista; sin embargo Jochen Mass no quisó salir con ellos, por lo que el también compañero de James Hunt fue muy criticado en los análisis posteriores.
Tras el paso de la tormenta, el ambiente de la cerra estaba tenso, por lo que tras las primeras vueltas los pilotos se dirigieron a los boxes para cambiar neumáticos y arreglar la estrategia de carrera luego de la lluvia, para entonces Niki Lauda venía muy retrasado por lo que cambió a neumaticos lisos y arrancó con presión.
Para la famosa curva de Bergwerk sucedió un accidente y es que Ferrari 312T2 perdió la suspensión, lo que hizo que Lauda a moverse al lado derecho haciéndolo golpear la barandilla, volvió a pista y fue golpeado con Haral Erti, piloto alemán así como por Bret Lunger.
Tras el fuerte choque, Arturo Merzario se detuvo para intentar sacar a Lauda del auto, dejando para la historia un momento tétrico para el automovilismo, al final fue trasladado a un hospital en helicóptero pues tenía graves lesiones tras estar encerrado en su auto donde inhaló humos tóxicos así como contusiones en el pecho.
Al llegar al hospital le salvaron la vida, pero perdió la oreja derecha, se quemó sus pestañas y cejas además de tener que ser inducido en un coma para poder tratarlo, pudo perder la vida pero a las seis semanas ya estaba en la pista tratando de ganar el título; sin embargo no pudo hacerlo.
James Hunt le arrebató el título ya que en el circuito de Fuji se negó a correr donde James Hunt llegó tercero donde sumó 69 puntos contra los 68 de Lauda, pues el piloto no quiso correr los mismos riesgos que vivió en el GP de Alemania, mientras que el circuito de Nurburgring no volvió a ser utilizado en su totalidad.
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