El mundo de la ciencia afirma que realizar ejercicio físico y mantener una alimentación balanceada son las claves para lograr cuidar de la salud de manera adecuada. A ello se pueden anexar muchos otros hábitos que son considerados saludables y que pueden convertirse en un estilo de vida.
El beneficio del ejercicio no es solo físico sino que también influye a nivel mental. Diferentes estudios han comprobado cómo mantenerse en actividad, evitar el sedentarismo y lograr un buen descanso contribuyen al cuidado del cerebro y a colaborar en la prevención del deterioro cognitivo.
Un ejercicio muy beneficioso
Son muchas las actividades que existen para mantenernos activos. No siempre se trata de algún deporte o de asistir a un gimnasio, realizar ejercicio se ha convertido en una pasión para muchos y es porque han descubierto y experimentado sus bondades.
Si nos centramos en el deterioro cognitivo, este sucede con la edad y puede incluir problemas de memoria, de lenguaje o de capacidad de juicio, según el Instituto Mayo Clinic. Por lo tanto, cuidar la salud del cerebro se torna necesario y es por eso que el ejercicio ideal para lograr este objetivo se conoce como la rutina del explorador.
La rutina del explorador consiste en buscar un lugar netamente natural en donde pasar mucho tiempo. La clave esa caminar todo tipo de terreno natural, sin ayudas tecnológicas como GPS, pero sí apoyado de herramientas como una brújula o un mapa. De esta manera podrás ubicarte en el espacio utilizando todos tus sentidos y habilidades cognitivas.
Este ejercicio impacta positivamente en la salud del cerebro , previene el deterioro cognitivo, ayuda a fortalecer la memoria, reduce el estrés, libera tensiones y colabora con el bienestar emocional por lo que se trata de una actividad ampliamente recomendada.
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