La época de calor comienza a hacerse presente poco a poco en todas las regiones del país y esto solo puede significar que la canícula o periodo canicular está próximo a llegar. Al respecto, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) ha confirmado que este año podremos esperar esta temporada en las últimas semanas de julio y las primeras de agosto. Se calcula que en México inicie el 21 de julio y llegue a su fin hasta el 19 de agosto, aunque con algunas variaciones respecto a la duración.
Como cada año, se prevé que los estados más afectados sean los del norte y el sur del país, pues los efectos serán más severos en Nuevo León, Tamaulipas, Veracruz, Colima, Guerrero, Oaxaca, Tabasco Chiapas, Campeche, Yucatán y Quintana Roo, principalmente. Sin embargo, también se esperan altas temperaturas en Puebla, Tlaxcala, Estado de México, Morelos, Michoacán y hasta San Luis Potosí.
¿Qué es la canícula?
Este nombre se deriva de la palabra "canes", que significa "perros". La alusión se hace con base en la constelación del Can Mayor y la estrella Sirio "La Abrasadora", pues su primera aparición en el horizonte solía coincidir con este periodo. Se conoce de este modo a un evento climático que se caracteriza por la disminución de lluvias, lo que implica un aumento de calor. Dependiendo del lugar, las temperaturas durante este periodo pueden ascender a los cuarenta grados, provocando la deshidratación y un fenómeno conocido como "golpe de calor" que puede ser mortal.
A pesar de que la duración puede variar, en México este periodo suele prolongarse durante cuarenta días, aproximadamente. A diferencia de otros años, la llegada de la temporada más calurosa también estará acompañada de una de las sequías más graves de la historia del país. Según Blanca Jiménez, directora de la Conagua, 32% del territorio nacional presenta una sequía anormal este año y el 71% de país presenta esta crisis de forma moderada a severa.
Recomendaciones principales
Por ello, una de las recomendaciones más importantes que se han hecho a la población es hacer un consumo responsable del agua, pues al falta de lluvias y el aumento en la temperatura podría significar un mayor riesgo para todo México. Algunas de las medidas que pueden implementarse, además del cuidado del agua, es estar pendientes de cualquier síntoma de deshidratación. Del mismo modo, las personas deberán usar protección solar para evitar cualquier daño en la piel, evitar la exposición al sol y actividades al aire libre de las 10 a.m. a las 4 p.m. (las horas con mayor índice de emisión de rayos UV) y usar sombrillas, gorras, sombreros y lentes de sol que ayuden a la protección.
También se recomienda mantener las casas ventiladas, con el objetivo de que refresquen los espacios y se pueda regular la temperatura. Para cumplir con este objetivo se puede recurrir a mantener las ventanas abiertas o colgar cortinas que eviten el paso de los rayos solares; usar ropa de cama y sábanas ligeras, entre otras. Con el objetivo de cuidar el agua se ha solicitado que las personas tomen duchas rápidas con agua fría.
aar