El uso excesivo de tablets y dispositivos móviles por parte de niños en edad preescolar es cada día más común entre la población y todavía más, en un momento crucial de confinamiento por la pandemia de Covid-19. Sin embargo, este es un fenómeno que se ha visto cada vez más en los últimos años.
Sin embargo, según una nueva investigación, el uso excesivo de gadgets, podría evitar que desarrollen y fortalezcan sus lazos afectivos entre los progenitores y sus hijos. Esto, de acuerdo con el director de Salud Mental de la Secretaría de Salud, Félix Higuera Romero, quien expuso que un bebé, lactante o preescolar debe desarrollar el vínculo que necesita en todo momento con sus padres.
"Cuando el niño predominantemente está enlazado con el dispositivo el vínculo se desarrolla con el aparato no con los padres y el fortalecimiento de los lazos de afecto entre padres e hijos es indispensable en momentos claves del desarrollo”, aseveró, mientras planteaba que en la psiquiatría para niños y adolescentes es de vital importancia desarrollar un vínculo entre padres e hijos durante los primeros años de vida. De lo contrario, se presentarían inseguridades, conductas oposicionistas y de protesta.
Apuntó también, que se pueden manifestar vínculos desorganizados, donde la criatura manifiesta indiferencia a esas respuestas de afecto o de arrullo, que los padres esperan que el niño desenvuelva.
Te podría interesar
Niños y adolescentes, tendrían poca tolerancia a la frustración
Higuera Romero expuso que el apego de los menores a las tabletas o dispositivos móviles también afectan las habilidades de comunicación y de lenguaje. Por lo que la coordinación motriz gruesa y fina, entre muchas otras destrezas, deben irse incorporando en función de los estímulos que la edad les va determinando.
Aseguró que aunque es por medio de las tabletas, que los menores descubren y aprenden, lo cual es positivo, hay todo un mundo de aprendizajes que el menor deja de hacer por estar de manera predominante expuesto a la tableta o el celular.
"Las tabletas y celulares son el tranquilizador, los que mitigan el berrinche, los entretienen para que la mamá siga con lo suyo”, explicó el experto, quien apuntó que esto es un problema provocado por los adultos y no por los niños.
Enfatizó también, que los niños pueden aprender mucho con el uso de la tableta o el celular, pero cuando el menor es educado para vivir de manera rápida una experiencia emocional, este irá aprendiendo de forma equivocada a vivir experiencias de manera inmediata, lo cual genera poca o nula tolerancia, paciencia o control emocional suficiente.