Necesidad de más energía, infraestructura, seguridad y agua en México fue el mensaje que puede resumir la reunión número 33 entre el Consejo Empresarial Mexicano para el Comercio Exterior (COMCE) y la Federación de Organizaciones Económicas del Japón (Keidanren).
De acuerdo con Marcus Baur, presidente del Comité Bilateral México - Japón del COMCE, y Shinya Katanozaka, presidente del Comité para México del Keidanren, “es necesario un mayor regionalismo en México en la producción de materias primas y componentes, la electromovilidad, logística, así como la sustentabilidad para mejorar el ambiente de negocios entre los dos países”.
En cuanto a los sectores con mayor potencial, Baur señaló que la manufactura automotriz y la electromovilidad son los dos rubros en donde hay una gran oportunidad de expansión y crecimiento. Otro sector es el de alimentos, ya que se tiene un crecimiento de doble dígito.
Las áreas en donde Baur observa posibilidades de co-inversión entre México y Japón, es el energético y automotriz, especialmente en algunas tecnologías de automatización, como también en infraestructura que necesita México para impulsar su crecimiento.
Sobre el ambiente de negocios en México, en vísperas de las elecciones del año entrante, el Sr. Katanozaka del Keidanren comentó que además de los comicios en el país, habrá un proceso electoral en Estados Unidos, con impacto directo al T-MEC, por ello, el sector empresarial japonés presta mucha atención a ambos procesos electorales.
Sin embargo, reconocen el papel de la actual administración en el crecimiento económico de México, mismo que ha favorecido las visitas de altos funcionarios nipones en los últimos años, tal es el caso de los Ministros de Asuntos Exteriores Toshimitsu Motegui (2021) y Yoshimasa Hayashi (2022), o el reciente encuentro en Naciones Unidas entre las Cancilleres Yoko Kamikawa y Alicia Bárcena.
Al respecto, Katanozaka reconoció la importancia de mantener estos contactos y recomendó que fueran presenciales. Asimismo, sugirió que para que México aproveche más el proceso de relocalización que están experimentando una gran cantidad de empresas japonesas, se deberá de dar a conocer más sobre México en Japón debido al poder y fuerza de los medios de comunicación.
Un ejemplo de esto es la reciente exposición de México antiguo: maya, azteca y Teotihuacan que se ha llevado a cabo en el Museo Nacional de Tokio y que posteriormente se presentó en el Museo Nacional de Kyushu, de esta manera, el conocimiento cultural mutuo es la base para expandir los negocios.
Apuntó también que, con el fin de desarrollar la energía verde (hidrógeno verde) es necesario establecer políticas públicas más claras e incentivos en este campo que ayudarán a la descarbonización, especialmente en los sectores protagonistas de la Inversión Extranjera Directa de Japón (IED) en México, como el caso de la industria automotriz, pero existen altas posibilidades de expandir esto a otros campos en donde las empresas japonesas podrán aportar además de capital, tecnología.
Finalmente, reconoció que hay temas pendientes por resolver, como el caso del acuerdo en Seguridad Social que ahora negocian las autoridades correspondientes de cada país. De resolverse este tema, sin duda, ayudaría a que más empresas japonesas decidieran establecerse en México.
POR: ADOLFO LABORDE
PAL
