Los resultados deben ponderarse y trabajar en consecuencia, sin triunfalismos a nivel nacional, ni catastrofismos en la Ciudad.
Guardando las proporciones, el resultado electoral del pasado domingo 6 de junio, me deja un sabor de boca como el del 2006. En aquel entonces, con el fraude electoral, se impuso al candidato de la derecha, pero se ganó la Ciudad de México.
Ahora, el resultado nacional es positivo y el de la Ciudad de México no lo es.
Aunque la oposición está tratando de minimizar el triunfo a nivel nacional, el hecho de ganar 11 de 15 gubernaturas con la alianza comandada por Morena, es un logro fundamental en la historia reciente del país.
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A pesar de la aprobación que la mayoría de los capitalinos tienen del gobierno de la Doctora Sheinbaum, ésta no se trasladó en votos para los candidatos de Morena en las Alcaldías, ni en las diputaciones federales.
Se tiene que revisar que pasó, ajustar sin lugar a duda y actuar en consecuencia.
El triunfo a nivel nacional no sólo no debe hacernos echar campanas al vuelo, sino llevarnos a mejorar -en términos del trabajo del gobierno federal y los gobiernos estatales- que van a iniciar sus labores.
Mejorar también los gobiernos estatales que desde hace tiempo son regidos por Morena, perfeccionar en los Ayuntamientos, y cuidar el trabajo de los diputados y senadores del partido.
La derrota en la ciudad tampoco debe magnificarse, por supuesto que una derrota duele, pero la izquierda en la Ciudad de México se ha levantado de momentos también adversos, como el que se tiene actualmente.
Con un congreso local dividido, y la mayoría de las alcaldías gobernadas por la oposición, estoy seguro que la Jefa de gobierno, demostrará que es capaz de gobernar en estas condiciones y llevar una relación institucional con los alcaldes de oposición.
Estoy cierto que demostrará que puede conducir a la ciudad hacia buenos resultados, sin confrontación, y trabajando por el bien de los capitalinos.
Además, el presidente, Andrés Manuel López Obrador considera que Morena no tuvo tanta ventaja en la ciudad porque hay más bombardeo de medios de información. “Aquí si ha tenido efecto la campaña de desprestigio, la guerra sucia, todavía antier estaban hablando a las casas metiendo miedo, pero todo eso va a superarse con más información”, dijo.
La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum celebró el virtual triunfo de Morena en la mayoría de las gubernaturas y el Congreso. Coincidió con el Presidente en que desde hace meses hay un movimiento de desprestigio contra el movimiento que encabezan, y esto tuvo un impacto en la ciudadanía. “Lo que nos corresponde es seguir trabajando y mejorando, continuar con los proyectos que nos propusimos para la ciudad y no dejaremos que regrese la corrupción”, aseguró.
Gran parte de la población ha tenido una buena aceptación hacia la administración de la Doctora Sheinbaum, y eso es incuestionable. También lo es que un gran sector del pueblo de México respalda la transformación nacional.
POR CESAR CRAVIOTO ROMERO
COMISIONADO PARA LA RECONSTRUCCIÓN DE LA CIUDAD DE MÉXICO
@CRAVIOTOCESAR
dza