La repentina liberación que hizo ayer la Casa Blanca de 50 millones de barriles de petróleo de la reserva estratégica sorprendió al mundo. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, quiso enviar una señal de alivio al consumidor estadounidense con un único propósito: controlar la inflación, que alcanzó un nivel de 6.2 por ciento en ese país y es la preocupación número uno de los economistas.
Pero para darnos una idea de qué tan débil es la alianza que tiene el gobierno de AMLO con el de Biden, véase la pléyade de países que sí acompañaron al Presidente estadounidense en su atrevida decisión. India se sumó a la acción, liberando cinco millones de barriles —más de una décima parte de su reserva estratégica—. Y otros países también le respondieron a Biden liberando parte de sus reservas: China, Japón, Corea del Sur y el Reino Unido. Este último sacará al mercado 1.5 millones de barriles de crudo.
México no pudo sumarse a ese grupo. No tenemos reservas estratégicas. Además, ni el esfuerzo que está realizando Pemex ni el deseo del presidente López Obrador de incrementar la producción nacional sirven en este momento.
El país no tiene la capacidad para incrementar la producción en campos nuevos y enfrenta el declive de los campos maduros. Esta coyuntura tomó a Pemex en el peor momento para apoyar en este esfuerzo de Biden.
En adición, las empresas privadas que pudieron haber apoyado hoy continúan paralizadas porque se sienten amenazadas por la política energética que está en marcha.
Ayer la famosa analista del sector petrolero Louise Dickson, de Rystad Energy, dijo que la acción de Biden marcó el nacimiento del llamado “Grupo Anti OPEP”, una coalición de países con fuerte demanda por petróleo que busca tomar el control de la oferta liberando reservas para torpedear los precios de crudo.
Ayer, hasta la hora de escribir estas líneas, ni el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírezde la O, ni la cuenta oficial de Petróleos Mexicanos habían emitido reacción alguna ante el repentino anuncio estadounidense.
México ha jugado al lado de los países de la OPEP en muchas ocasiones. ¿Será que ahora, si el mundo petrolero se divide, seguiremos alineados con ese cartel?; o ¿alguien en la 4T sugerirá a AMLO que tenga un gesto con el presidente que apenas la semana pasada en la Casa Blanca le tendió la mano? Este es momento de responder, y al propio gobierno mexicano le conviene, si desea tener aliados que le auxilien a contener los precios de la gasolina. Porque si no estamos ni contamos en la OPEP, y tampoco en el Grupo Anti OPEP, pues no somos más que un apéndice energético; una caricatura de lo que nos venden cada mañana.
ZOÉ
El director general del IMSS Zoé Robledo informó ayer que “desde 2020 a la fecha se han basificado 8 mil 337 doctores, y 23 mil 116 enfermeros”.
POR CARLOS MOTA
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