La posible imposición de nuevos aranceles por parte de Estados Unidos a productos mexicanos ha generado incertidumbre tanto a nivel nacional como en entidades claves como Coahuila, cuyo papel como potencia exportadora se ve amenazado. Para entender el impacto que esto podría tener en el estado, el maestro Víctor Axel Amarillas Urbina, coordinador de la Facultad de Economía de la Universidad Autónoma de Coahuila, explicó las consecuencias de esta nueva política comercial.
En una entrevista reciente para Heraldo Radio La Laguna, Amarillas Urbina destacó que, aunque las amenazas de aranceles por parte de Estados Unidos no son nuevas, esta vez la situación parece más seria. "Desde que Donald Trump ganó las elecciones en 2024, se comenzó a manejar la posibilidad de imponer nuevos aranceles, y ahora parece que la amenaza se convertirá en realidad”, explicó el académico.
Los efectos inmediatos de los aranceles
El impacto más directo de esta medida sería sobre los productos mexicanos que cruzan la frontera hacia Estados Unidos, los cuales, a partir de la implementación de los nuevos aranceles, tendrían que pagar una cuota del 25% al momento de entrar al país vecino. Este aumento en el costo de los productos podría trasladarse al precio final para los consumidores estadounidenses. “Por ejemplo, un kilo de aguacate que exporta México, al llegar a Estados Unidos, tendría un precio un 25% más alto, lo que podría reducir su competitividad”, señaló Amarillas Urbina.

El maestro también subrayó que muchos productos mexicanos podrían perder competitividad debido al encarecimiento de sus precios, lo que implicaría una menor demanda en el mercado estadounidense, que representa uno de los principales destinos de exportación para México.
El impacto en Coahuila, amenaza para el sector automotriz
Uno de los sectores más afectados por esta medida sería el automotriz, que tiene una gran presencia en Coahuila. El estado es uno de los principales exportadores de México, con una parte significativa de su producción destinada a Estados Unidos. Amarillas Urbina afirmó que “Coahuila es el segundo estado con más exportaciones hacia Estados Unidos, solo detrás de Chihuahua. Si estos aranceles se imponen, será uno de los estados más golpeados”.

Coahuila es hogar de importantes armadoras de vehículos, muchas de las cuales tienen capital estadounidense. Si los vehículos fabricados en el estado sufren un incremento de 25% en su precio debido a los aranceles, las armadoras podrían enfrentar un gran dilema. “Las empresas tendrán dos opciones: dejar de vender sus vehículos en el mercado estadounidense o buscar otros mercados, lo cual no es sencillo. La mayoría de las armadoras están orientadas a satisfacer la demanda del mercado norteamericano, que es el mayor consumidor de automóviles en el mundo”, explicó el economista.
Si estas armadoras no logran diversificar sus mercados o adaptarse a los nuevos costos, podrían enfrentar una disminución en la producción o incluso el cierre de sus plantas, lo que se traduciría en un aumento del desempleo y una crisis económica aún más profunda en el estado.
Cambio de vocación exportadora
El maestro Amarillas Urbina también advirtió que, de mantenerse estos aranceles, Coahuila podría estar en la antesala de un cambio en su vocación exportadora. “Si dos terceras partes de nuestras exportaciones dependen del sector automotriz y estas exportaciones se ven afectadas, podríamos estar frente a una crisis económica grave. Esto podría llevar a que algunas armadoras cierren y, en consecuencia, a la quiebra de empresas proveedoras y una mayor tasa de desempleo”, expresó.
En este contexto, el estado enfrentaría uno de los retos económicos más grandes de su historia reciente. Aunque aún no está claro cuál será la respuesta del gobierno mexicano ante esta amenaza, lo que sí es evidente es que el panorama económico de Coahuila, y especialmente su sector automotriz, se ve comprometido.
¿Qué depara el futuro?
Amarillas Urbina concluyó la entrevista señalando que la situación es incierta, pero preocupante. “Aún no sabemos cómo responderá el gobierno mexicano a estos aranceles. Existe la posibilidad de que se recurra al arbitraje dentro del marco del T-MEC o incluso ante la Organización Mundial del Comercio, pero lo cierto es que, si Estados Unidos decide salirse de este acuerdo, las reglas del juego cambiarán por completo”, indicó el académico.
Este es, sin duda, un momento crítico para la economía de Coahuila, donde la dependencia del mercado estadounidense es tan fuerte que cualquier alteración significativa podría derivar en un daño estructural que afecte la estabilidad económica de muchas familias.
Así, los coahuilenses se preparan para enfrentar un panorama volátil, incierto y complejo, en el que la incertidumbre no solo involucra el futuro económico, sino también el bienestar de los miles de trabajadores que dependen del sector exportador, especialmente el automotriz, para su sustento.
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