Ante la saturación del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), el gobierno determinó la reducción de 52 a 43 operaciones máximas. Esto comenzará a implementarse a partir del próximo 29 de octubre, con el inicio de la temporada invernal.
En entrevista con Alejandro Sánchez para Informativo Fin de Semana de El Heraldo Media Group, el experto en aviación, Fernando Gómez Suárez, dio a conocer las ventajas y desventajas de esta decisión.
"Lo bueno es que podría reducirse el riesgo de alguna colisión, algún accidente, que ojala no suceda, dado que el aeropuerto ya está saturado desde hace décadas, y eso conlleva un riesgo en el aire, en las operaciones aéreas", indicó.
Dijo que se está intentando combatir la saturación que prevalece en el espacio aéreo, pero también en tierra, ya que en las terminales también se ven largas filas en el área de documentación de las líneas aéreas, en las salas de migración, en las de aduana, que generan pérdida de tiempo y productividad.
Señaló que las autoridades aeronáuticas debieron consultar antes de reducirlos, para saber cuál es el camino a seguir más adecuado, ya que pueden surgir complicaciones.
"Se dice fácil, pero implementarlo ya no, porque a quién le vas a dar preferencia para reducir a todos por parejo, no te da la aritmética, le vas a dar preferencia a quienes tengan más antigüedad sobre sus posiciones de contacto, sus horarios de vuelo, no se puede, van a reclamar las demás", afirmó.
En ese sentido, agregó, si México está buscando abrir rutas, destinos hacia el extranjero para el próximo año, tampoco se podrá hacer porque se deben modificar los convenios bilaterales aéreos, revisar que la aerolínea no se ampare, porque quizá señale que se está violentando sus derechos respecto a la Ley de Competitividad.
"Al reducir ese 30 por ciento la capacidad de operaciones por hora, multiplicado o trasladado también les va afectar los ingresos de las aerolíneas porque dejan de tener operaciones, los ingresos de los locales comerciales porque habrá menos gente en los pasillo, eso es lo malo, no hay un consenso o cabildeo previo, ese es el problema", indicó.