El pasado 20 de julio, se celebró en México, el Día del Perro, sin embargo, en el municipio michoacano de Paracho, lomitos en situación de calle fueron víctimas de un envenenamiento masivo.
Organizaciones protectoras de animales señalaron que este caso ocurrió días previos a la realización del Festival de Globos de Cantoya 2023 (iniciado el 21 de julio), por lo que consideran, los responsables llevaron a cabo la intoxicación de perritos con el objetivo de “mejorar” la imagen de la cabecera municipal ante la llegada de cientos de visitantes.
“Es una muy triste historia que se repite una vez más en Paracho. Tenemos perros ubicados, que los hemos ayudado con vacunas, rehabilitación, esterilización, a veces andan en la calle pues nosotros como rescatistas no contamos con un espacio, sin embargo no tenemos el lugar para resguardar a perros que estamos siguiendo y de pronto desaparecen”, lamentó María Luisa Hernández Alonzo, protectora animal del Colectivo “Promotoras de la Dignidad Animal”.
La activista detalló que en la organización que integra, se recibió el reporte de 12 perros envenenados, sin embargo, la asociación “Huellitas de Amor” afirma que fueron por lo menos 25 casos; solo dos de los peludos afectados lograron sobrevivir, dijo.
Frecuentan los envenenamientos a perros callejeros en Paracho
Esta práctica, afirma, es común en Paracho, donde habitantes suelen colocar en las plazas y calles principales, piezas de pollo, bolas de masa, carne de res y todo tipo de alimentos atractivos para los perros, cubiertas con sustancias tóxicas mortales.
“Encontramos su excremento, su salivación, su vomito, y vemos su cara de terrible dolor y angustia que vivieron, nos llegaron reportes que veían a los perros temblorosos, que ya no se podían mantener en pie, tuvimos que hacer una campaña para que aunque sea tuvieran agua oxigenada las personas y se las dieran a beber”, señaló.
El municipio enclavado en el corazón de la Meseta Purhépecha cuenta con un reglamento para la atención de animales, no obstante, ni la Dirección Municipal de Medio Ambiente o el responsable de la regiduría de Enología, han fijado postura sobre el envenenamiento de los canes.