La violencia en México no da tregua, la dirigida a las mujeres es alarmante, pues los feminicidios y asesinatos de féminas se han vuelto una constante, en algunas entidades han repuntado, tal es el caso de Tamaulipas, donde estos crímenes se han cuadriplicado. Justo este viernes 17 de marzo, un cuerpo descuartizado fue encontrado en los municipios de Güémez y Padilla.
El primer hallazgo se realizó a las 07:30 de la mañana sobre un puente ubicado en el kilómetro 15 de la carretera Ciudad Victoria a Matamoros. Lo que se encontró fue realmente aterrador: una cabeza, el cuero cabelludo y la piel que le despegaron al cráneo. Junto a los restos, fue dejado un mensaje que un grupo criminal se adjudicó. A las 08:50 de la mañana, en el municipio de Padilla, se reportó un vehículo abandonado en la plaza principal del poblado El Barretal. Dentro de la camioneta Ford Expedition se encontró un tronco humano.
Como si de un juego macabro se tratara, a las 9:30 de la mañana se encontró otra parte del cuerpo, habitantes de zonas aledañas al kilómetro 25 del tramo de la carretera Ciudad Victoria-Monterrey, reportaron haber visto un par de muslos humanos. Media hora después, cerca de donde se dejó la cabeza, fueron hallados los pies.
Los restos humanos fueron recolectados por peritos pertenecientes a la Fiscalía General del Estado (FGE) de Tamaulipas, fueron llevados al Servicio Médico Forense (Semefo), donde se le practicarán los exámenes forenses correspondientes, así como la extracción de material genéticos para tratar de identificar a la víctima.
Otras víctimas
El pasado miércoles 15 de marzo, dos casos de feminicidio se registraron en Tamaulipas. El primero fue por la mañana, la víctima fue identificada como Imelda, una mujer de 57 años. Ella fue encontrada sin vida dentro de su departamento ubicado en el centro de Tampico.
Al principio se creyó que la mujer se suicidó, pues cerca de donde estaba su cuerpo sin vida, fueron encontradas varias pastillas tiradas. Sin embargo, la Policía Investigadora reveló que la fémina tenía golpes en distintas partes del cuerpo, además de dos pastillas metidas en las fosas nasales, por lo que se abrió una carpeta de investigación por homicidio doloso, pero podría cambiar a feminicidio.
El otro caso fue el de Guadalupe Sarizay Pérez Uribe, una joven de 25 años que trabajaba en una maquila. Sus padres la reportaron como desaparecida desde el sábado 11 de marzo, lo último que supieron es que había salido rumbo a su trabajo. Ella era mamá y se dedicaba a su hija y a trabajar, por lo que a su familia le preocupó no saber de ella.
Llamaron a la empresa y les dijeron que ese día no le tocaba laborar. Comenzaron a revisar sus redes sociales y notaron un comentario de un exnovio que les llamó la atención, por lo que sospechan de él. Finalmente su cuerpo fue encontrado con al menos 20 heridas de arma blanca.
DMGS
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