Son cientos de trabajadores provenientes de estados como Oaxaca, Zacatecas, Michoacán y pobladores indigenas de la sierra tarahumara quienes se trasladan hasta el estado de Chihuahua para laborar en la llamada temporada de pizca. La mayoría de ellos arriban con su familia, por tal motivo la Secretaría de educación cultura y deporte implementa programas especiales para brindar educación a los hijos de estos trabajadores agrícolas.
En la actualidad son cerca de mil 500 niños quienes reciben en aulas móviles su educación básica, en los diversos centros agrícolas, principalmente en el Distrito de riego 05 y la región de Rubio.
Las escuelas de educación migrante operan cerca de los campos agrícolas, albergues y campamentos en donde acuden las familias de jornaleros, con un ciclo escolar adaptado a las necesidades de dicha población en movilidad, que da inicio en marzo y concluye en noviembre de cada año, de acuerdo a la Secretaría de Educacion.
Si bien, el brindar educación es complejo por la migración de los padres dada la temporalidad de su contratación, se ha tratado de atender a este sector y para ello se creó en el país un sistema de información en el que se registra a los estudiantes ,y a través de una clave que arroja el mismo sistema se puede dar seguimiento.
De esta manera se garantiza el acceso a la educacion de miles de infantes.
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