Los gobiernos estatales de Michoacán y Jalisco, firmaron un Convenio de Seguridad que tiene por objetivo mejorar las condiciones de la población en ambas entidades y con ello, pacificar la región entre las dos entidades.
En Palacio de Gobierno de la ciudad de Morelia, los mandatarios Alfredo Ramírez Bedolla, de Michoacán y Enrique Alfaro Ramírez, de Jalisco, coincidieron en que, para lograr la paz, se requiere de diversos elementos relacionados al impulso a la economía, atracción de inversión, creación de empleos y generación de oportunidades.
Enrique Alfaro Ramírez, recordó que ambas entidades enfrentan un problema de violencia de escala nacional que ha tenido en sus fronteras, episodios duros que los han obligado a tomar medidas extraordinarias, pero la realidad que comparten los dos estados, dijo, "es mucho más que un grupo de delincuentes que pretenden someter a las instituciones públicas de este país".
"La relación entre nuestros estados tiene que fortalecerse en una estrategia multilateral y tiene que hacerse un esfuerzo de un ejercicio sostenido durante los próximos años. Entendemos y somos conscientes del problema puntual que se vive en algunos puntos de las fronteras que compartimos.
Asumimos que hay un problema, pero queremos que la gente sepa la naturaleza de este problema y de cómo lo estamos abordando, porque todos los días en Michoacán y Jalisco estamos trabajando por garantizar la seguridad de la gente", afirmó Enrique Alfaro.
Alfredo Ramírez Bedolla, señaló que el convenio, además de ser una alianza estratégica en materia de seguridad, también es una alianza para potencializar el desarrollo económico y tratar de revertir los escenarios complejos en los que se encuentran algunas zonas de estas entidades, después de tres décadas de violencia.
Ramírez Bedolla afirmó que "en Michoacán se combate a todos y cada uno de los grupos delictivos con determinación y sin tregua solo que con estrategias que van más allá de las balas, por ello los grupos delincuenciales quieren empañar la labor de los cuerpos de seguridad".
Tras la firma del documento, los gobernadores de las entidades vecinas coincidieron en que a partir de ahora, no habrá un blindaje entre Michoacán y Jalisco, sino una agenda conjunta.
También señalaron que a pesar de tener "enfoques distintos" son conscientes de que en la agenda de seguridad, "no puede haber diferencias", pues lo que se requiere es una coordinación efectiva.
SSB
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