ATAÚDES

Por muertos de la pandemia, reviven ataúdes a la industria de los madereros

El sector en la entidad ha experimentado una recuperación gracias a la demanda de productos funerarios más económicos

NACIONAL

·
El sector en la entidad ha experimentado una recuperación gracias a la demanda de productos funerarios más económicos. Foto: Especial Créditos: Especial

Durante la pandemia, la industria maderera del Estado de México registró pérdidas por 10 mil millones de pesos; sin embargo, la alta demanda en los ataúdes de madera, que aumentó en más de 150 por ciento este año, al ser más baratos que los de metal, representó un alivio para los productores del sector, aseguró Marco Antonio Ruiz Ruiz, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Maderera (Canainma) delegación Edomex.

Señaló que ante la falta de recursos económicos, consecuencia de la crisis ocasionada por la emergencia sanitaria, los ciudadanos buscaron comprar sarcófagos o urnas económicas, y la madera representó una opción.

“Los aserraderos, en lugar de vender el producto como lo estaban haciendo, se dedicaron a vender un tipo de madera de cortas y medianas dimensiones, para atender la gran demanda de este material para ataúdes y urnas que se tuvo”, explicó.

Y agregó que “muchas personas de muy bajos recursos no tuvieron oportunidad de llevar a sus familiares a un hospital, ni de pagar un funeral, donde se encontraban con una caja que es más cara hecha de fierro”.

Precisó que un féretro de madera, de los más económicos, cuesta de 900 a mil 500 pesos, mientras que uno de metal comienza en los tres mil pesos.

Otro rubro en el que también tuvieron una elevada demanda los aserraderos mexiquenses fue en tarimas y empaques, principalmente por parte de empresas relacionadas con alimentos, que hacían donaciones durante la contingencia sanitaria; o farmacéuticas, para exportación de productos.

En el Edomex trabajan alrededor de 350 aserraderos que dan empleo a 500 mil familias de manera directa, más los trabajos indirectos en sectores como fabricantes de muebles y artesanos, entre otros.

El directivo de la Canainma dijo que la producción de los aserraderos bajó entre 40 y 50 por ciento el año pasado; actualmente no han logrado regresar a los niveles que se tenían en 2019.

De acuerdo con información de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), a partir de 2017 se aserran 12 mil metros cúbicos de madera de pino y oyamel cada año en el Estado de México para su comercialización local y regional, principalmente en los municipios Naucalpan, Coacalco, Ecatepec y Nicolás Romero.

MAAZ