En la Línea Dorada del Metro, especialistas franceses descartaron problemas estructurales en el tramo que corre de Tláhuac
a Culhuacán
“En relación con la infraestructura, el comportamiento de las obras en el tramo en viaducto es normal, no hay riesgo de desarrollo vibratorio bajo el paso de los trenes por problemas estructurales”, señala el oficio fechado el 12 de junio de 2014.
En el documento elaborado por la empresa Systra, sin embargo, recomienda tener un “cuidado especial” para revisar la geometría del tramo elevado; además, se hizo un exhorto para realizar un levantamiento topográfico cada 12 meses como medida preventiva de seguridad.
El Gobierno de la Ciudad de México realiza una revisión de las empresas que han realizado inspecciones o peritajes de la construcción y operación de la Línea 12 del Metro, entre las que se destaca el peritaje de empresa Systra, en 2014, cuando se suspendió la operación del transporte en 11 estaciones del tramo de Tláhuac a Culhuacán.
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La firma intervino, luego de que se reportaran fallas en el diseño, construcción y planeación que generó una sobrecarga en las vías y su deterioro prematuro, lo que hizo necesaria la sustitución de una parte de la estructura.
“El origen del problema no parece ser un defecto de los materiales, sino un problema muy delicado de compatibilidad de nivel de interfaz riel-rueda, donde se tiene un riel que responde al estándar Arema y una rueda fabricada bajo otros estándares”, señalaron en el expediente con número de referencia MEX-S177-REP-0012-B.
La consultora enlistó 100 recomendaciones para darle específicamente mantenimiento adecuado a la instalación guía de los trenes, ya que se detectaron esfuerzos “extraordinarios” que reducían su vida útil.
Las recomendaciones anteriores se encuentran en el informe de 258 páginas, en las que se detalla que “al final de esta etapa de análisis, Systra propone medidas de acciones inmediatas que pueden ser implementadas sin encarecer o poner en riesgo las medidas correctivas de largo plazo”.
VARIOS FACTORES
El desplome ocurrido en el tramo elevado de la Línea Dorada del Metro pudo deberse a una conjunción de factores, aseguró Francisco García Álvarez, integrante del Consejo Consultivo de la Sociedad Mexicana de Ingeniería Estructura.
“Creo que es una desafortunada cadena de eslabones que se rompieron o se que juntaron para que estas vigas de ese tramo muy particular se colapsaran”, aseguró en la Mesa de de Opinión El Heraldo–La Silla Rota.
Ante el cuestionamiento de si el colapso obedeció a un daño estructural o a la falta de mantenimiento de la pieza que se vino abajo, García consideró que el ensamble de piezas de gran tamaño fue muy complejo.
“Para que esa viga estuviera montada en ese sitio, hubo una cadena muy grande de personas que tuvieron que haberse involucrado varios años antes de que esa viga llegara a esa posición, desde diseñadores, constructores, planeadores, supervisores y no es solamente una razón; el diseño estuvo bien hecho, hay cientos de vigas similares a esa en todo el tramo de acero y el diseño se ha comportado adecuadamente.
“La logística para llevar esas trabes a ese sitio tan complicado de la ciudad, con calles estrechas, con alta densidad de población, con mucho tráfico, obligó a que las pieza no fueron llevadas en una sola dimensión, sino que fueran divididas en dos o tres pedazos”, añadió.