Desde el pasado 09 de enero, Wendy Sánchez está desaparecida y hasta ahora, no hay avances en la investigación. Sin embargo, amigos y familiares se han sumado a través de campañas con pinturas y otras expresiones digitalizadas que son compartidas en redes sociales y en las calles, se atendió el llamado de su hermano, Baruc Sánchez quien ha llamado a una jornada de creación por Wendy interviniendo una foto o realizando un pieza para seguir realizando la difusión del caso de mi hermana, con la leyenda #TeBuscamosWendy.
Wendy de 33 años, salió el sábado 09 de enero a las 07:00 horas de San Pancho en Nayarit, rumbo a Guadalajara, viajaba sola conduciendo una camioneta Jeep Cherokee color blanca y desde entonces, sus familiares no han tenido información de ella.
La denuncia por desaparición ya fue presentada ante la Fiscalía estatal bajo el número de reporte al 911, 210110-123 y la investigación, DI-665-2021.
Además, se solicitó el apoyo para quienes tengan drones, participen en la búsqueda como voluntarios con sus equipos para poder realizar una búsqueda en los alrededores de Puerto Vallarta y San Pancho, para descartar que haya sufrido un accidente en los tramos de curvas y que se encuentre en un barranco; hasta ahora, no hay noticias de su paradero.
“Wendy es una persona que siempre está dispuesta a dar, por eso están querida por tantos”, publicó su hermano acompañando una historia acompañada de fotografías donde destacó que siempre dejó huella con su disposición por apoyar y sumar.
Como parte de su trabajo, Wendy es una artista que realizaba distintas contribuciones en asociaciones civiles, una de ellas, Un Techo para mi país México AC (TECHO) en donde colabora desde el 2012, y que gracias a su trabajo, en el 2013, el Gobierno de Tlaquepaque le otorgó el galardón por el Premio Municipal a la Juventud Sobresaliente en la categoría de Actitud Altruista.
Los teléfonos para dar información que ayude a localizarla así como a la investigación, son el 333837 6000 extensiones 16148, 16141 y 16142 además del 800 640 9280.
Por: Mayeli Mariscal