La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, destacó el legado que dejó el Premio Nobel de Química de 1995, Mario Molina, quien falleció ayer a causa de un infarto.
“Se nos fue un grande, la verdad, porque el doctor Molina, no solamente fue un gran científico y deja un legado en términos de la ciencia atmosférica enorme.
“Su legado no solamente es científico, sino es el uso de la ciencia para apoyar la restauración de nuestro planeta, de los recursos naturales y del medio ambiente”, afirmó en conferencia de prensa, tras un evento en Xochimilco.
La mandataria recordó que trabajó con Molina, como maestro, como coordinador de un grupo de trabajo que se hizo a finales de los noventas para estudiar y definir criterios para la disminución de la contaminación atmosférica de la ciudad.
Cuando Sheinbaum fue secretaria del Medio Ambiente, entre 2000 y 2006, colaboraron de manera muy estrecha. Incluso, recordó que hace poco participó en una de sus conferencias de prensa.
“Se hizo este megaproyecto muy, muy importante de investigación con distintas instituciones la UNAM, el Poli, el Instituto Mexicano del Petróleo e Instituciones de Educación de Investigación de Estados Unidos, el proyecto “Milagro”, que dio resultados muy, muy importantes para disminuir la contaminación atmosférica de la ciudad”.
“Recientemente todavía publicó un artículo relacionado con los aerosoles y la transmisión del Coronavirus a través de aerosoles, que fue justamente entre otras razones lo que generó que la Organización Mundial de la Salud, reconociera la importancia del uso del cubrebocas, lo tuvimos recientemente en una conferencia de prensa, justamente hablando de este tema”, contó.
Rememoró que le dieron el Premio Nobel de Química en 1995 por su investigación relacionada con la disminución de la capa de ozono en la estratosfera.
"No solamente hizo esta investigación, sino que se dedicó a trabajar en el protocolo de Montreal, que puso un límite a los clorofluorocarbonos que son los que destruyen la capa de ozono", dijo.
También estuvo vinculado con el protocolo de Kioto y en general el Panel Intergubernamental de Cambio Climático, trabajando para la reducción de gases de efecto invernadero y sus investigaciones y también para la contaminación atmosférica.
“No solamente su legado es para la ciencia atmosférica particularmente este tema de los aerosoles que él trabajó de manera muy, muy, importante sino él también fue un luchador por los temas ambientales, es decir, el aplicó el conocimiento científico para ayudar a resolver los problemas ambientales del planeta de nuestro país, de nuestra ciudad en particular o de la Zona Metropolitana del Valle de México”, agregó.
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