Kaylee Muthart pudo seguir con su vida cotidiana luego de que hace algunos años tuvo una fuerte experiencia por los efectos de las drogas cuando decidió arrancarse los ojos para que pudiera salvar a la humanidad; sin embargo, de nuevo la vida la puso a prueba con un otro golpe.
La historia de Kaylee se dio a conocer cuando quiso probar si era posible acercarse a Dios por medio de sustancias químicas toda vez que había sufrido una ruptura amorosa, la cual combinada con el consumo de drogas, la llevó a pensar que para que parara el sufrimiento en el mundo, tendría que haber un sacrificio.
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¿Cómo fue que la joven se cegó?
“Recuerdo que pensé que alguien tenía que sacrificar algo importante para arreglar el mundo, y esa persona era yo. Pensé que todos morirían si no me arrancaba los ojos inmediatamente", recordó Kaylee sobre esa sesión de metanfetamina que hizo en 2018 cuando tenía 20 años de edad
Entonces Kaylee perdió la vista de manera permanente, pero ello no le impidió que pudiera desarrollarse como cualquier otra persona, ya que durante estos años pudo conseguir un empleo en un negocio de comida en el estado de Florida, Estados Unidos.
¿Qué nuevo golpe recibió Kaylee Muthart?
Kaylee consiguió trabajar como lavaplatos en el restaurante The Rose Villa, pero tuvo una complicación con su empleador quien la descubrió llevando a cabo una práctica considerada como una falta en el establecimiento de comida. La mujer relató lo que sucedió en sus redes sociales.
“Acabo de ser despedida por alimentar a una gata con ocho gatitos fuera de mi trabajo después de que la gente del restaurante la había estado alimentando todas las noches”: Kaylee Muthart.
La ahora joven de 26 años de edad siguió: “De repente dejaron de alimentarla de la nada porque el administrador de la propiedad les dijo que no lo hicieran… Me acaban de despedir por darle de comer a la gata”, dijo Kaylee quien pidio ayuda a la gente para que se turnen para alimentar a los felinos. Pese a su despido, Kaylee indicó que está agradecida con el restaurante por haberla contratada.
