Nayara Ibarbia, una joven de 17 años, perdió la vida el pasado 26 de abril de 2017, cuando viajaba con su entonces novio en un automóvil de la marca Fiat. La pareja de la mujer, Gustavo Fabián Villarreal aparentemente perdió el control de la unidad y quedó estrellado contra un camión municipal que estaba estacionado frente a una establecimiento de la localidad de Monte Maíz, en Argentina. Durante años, la familia de la mujer luchó para demostrar que el supuesto incidente fue ocasionado por el hombre y, finalmente, esta semana un juez lo encontró culpable por el feminicidio de Ibarbia.
Familiares de la mujer detallaron, a medios locales, que Nayara sufrió graves traumatismos y tuvo pérdida de masa encefálica, lo que la dejo en coma. Finalmente, ella murió nueve días después, mientras que su novio apenas tuvo alguna que otra fractura, nada de gravedad. Desde entonces, la familia de la mujer denunció que el choque había sido provocado para matarla.
Ahora, luego de seis años, la Justicia le dio la razón: Villarreal fue condenado a prisión perpetua el pasado 9 de mayo de 2023. ?En un primer momento, el hombre fue acusado de "homicidio culposo", pero en mayo de 2020, la fiscal de instrucción Isabel Reyna cambió la acusación a "homicidio agravado por el vínculo y por mediar violencia de género".
Los familiares de la adolescente testificaron durante el juicio que el choque no había sido una accidente y apuntaron contra Villarreal porque sabían que ella lo quería dejar. De igual manera, aseguraron que el hombre a direccionó intencionalmente el Fiat Uno contra el camión haciendo que Nayara, quien viajaba en el asiento del acompañante, se llevara la peor parte del golpe.
"El auto fue el arma. Nadie me podrá devolver a mi hija pero al menos tenemos un poco de paz en nuestro corazón. Estamos conformes con la sentencia. Fueron años muy duros para poder llegar a demostrar el asesinato. De 2017 a 2020 Villarreal estuvo libre, se reía de nosotros en la calle. Hemos pasado por cosas muy feas", señaló Valeria Contín, mamá de Nayara, ante medios locales.
Por su parte, luego de anunciarse la condena, la abogada de la familia, Eugenia Fernández, puso énfasis en la modalidad del feminicidio y alertó: "Es un caso referente donde se ha demostrado el contexto de violencia de género más allá de las circunstancias propias del hecho".
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