Washington no ha visto "un retiro significativo" de tropas rusas de las fronteras con Ucrania a pesar de los anuncios de Moscú, dijo ayer el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken.
La amenaza de Rusia "está ahí, es real", declaró a ABC. "Lo que estamos viendo no es un retiro significativo. Por el contrario, seguimos viendo militares rusos, en particular fuerzas que serían la avanzada de una posible nueva agresión contra Ucrania, que continúan estando en la frontera".
Blinken reafirmó que el presidente ruso, Vladimir Putin, "tiene la capacidad para actuar en cualquier momento. Puede apretar el gatillo, puede hacerlo hoy, puede hacerlo mañana, puede hacerlo la próxima semana".
Mientras, el presidente de EU, Joe Biden, y el jefe de Gobierno alemán, Olaf Scholz, exigieron a Rusia que adopte "medidas reales de desescalada" para evitar el conflicto con Ucrania, y amenazaron a Moscú con sanciones.
En una conversación telefónica, el Presidente estadounidense y el canciller alemán coincidieron en que "Rusia debe tomar medidas reales de desescalada".
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, prometió que su país resistirá a cualquier invasión.
Zelenski, que decretó el día de ayer como el "Día de la Unidad", asistió a unas maniobras militares cerca de Rivné, en el oeste, donde una hilera de vehículos fueron destrozados por misiles y varios blindados efectuaron disparos en medio de un páramo amarillento.
Rusia acusó a Washington de amenazarle con 60 mil tropas en Europa.
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