Un mapa recientemente elaborado dibujó a Estados Unidos dividido entre estados o regiones rojas y azules, pero en realidad muestra las zonas con mayor y menor vacunación contra el COVID-19.
El rojo representa las áreas dominadas por el Partido Republicano, que votaron por el expresidente Donald Trump en noviembre pasado. Los azules, los demócratas favorables al mandatario Joe Biden.
El mapa es reflejo de la polarización política, en un país donde el aparato republicano se ha unificado alrededor de la posición escéptica de Trump y alega lo mismo fraude electoral, que advierte del peligro de las vacunas.
El resultado actual es que 30% de los estadounidenses no ha recibido ningún tipo de vacuna, especialmente por resistencias que van de posicionamiento político contra imposiciones del gobierno a temores como "control" mental.
Nueve de los 10 estados con menor promedio de vacunación y menor nivel educativo, son "rojos" y del sur, donde un nuevo incremento de contagios por COVID-19 llevó ahora a un vuelco del aparato político republicano, que pasó de escepticismo en favor de un esfuerzo de "persuadir" a la población de vacunarse.
Estados Unidos no es el único país donde se ha manifestado un movimiento antivacuna a partir del COVID-19, pero sí es notable por la mezcla de nociones religiosas, políticas y teorías conspirativas.
De hecho, en EU es un movimiento político que llevó ahora a que congresos estatales analizaran leyes que prohibían la "discriminación" contra personas que rechazan las vacunas o se niegan a usar mascarillas.
Pero el resultado ha sido brutal. "Esto se está convirtiendo en una pandemia de los no vacunados", dijo la directora de los Centros de Control de Enfermedades (CDC), Rochelle Walensky.
EU enfrentó la semana pasada unos 26 mil casos nuevos por día, 70% más que la semana anterior, informó la directora de los CDC.
Las hospitalizaciones aumentaron 36% y las muertes se elevaron en 26%, a un promedio de 211 por día.
En ese sentido, Europa es desde hace tiempo un campo de batalla pleno de desinformación y de nociones impresionantes. Francia, Holanda, Grecia e Italia, entre otras, han registrado en las últimas semanas protestas en contra de las vacunas y del llamado Green Pass.
Aún así, de entre todos los países destaca la renuencia en EU, donde tiene abiertos tonos políticos.
Hasta ahora, uno de los requisitos para parecer buen republicano era oponerse a la vacunación y los mandatos médicos contra la pandemia, en defensa de libertades personales y medidas autoritarias.
PAL