El lunes 8 de febrero por la noche, un hombre realizó una llamada al 911 en busca de ayuda. Reportó que él y otras 80 personas se encontraban atrapados en la parte trasera de un camión y que estaban experimentando problemas para respirar. A 3 días de eso, el vehículo aún no ha podido ser localizado.
El pedido de auxilio se presentó en el condado de Bexar, en el área de San Antonio, Texas. Los despachadores del servicio de emergencia declararon que la conversación se desarrolló en español y tuvo una duración de cuatro minutos. En ella, un sujeto dijo que él y otras decenas de inmigrantes se estaban quedando sin aire y que estaban muriendo, mientras que se escuchaban gritos desesperados al fondo. La comunicación se cortó sin poder obtener más información.
Minutos más tarde, otra víctima más estableció contacto con el 911 indicando que seguían cautivos. Los afectados desconocían su ubicación, por lo que sólo pudieron indicar que se encontraban detenidos a lado de una carretera, ya que escuchaban pasar coches a alta velocidad. También refirieron estar en un camión-cisterna.
Desde entonces, las autoridades locales, federales y la Agencia de Inmigración y Aduanas (CBP) se encuentran averiguando más sobre el caso e intentando localizar a los migrantes, quienes podrían ser víctimas de contrabandistas. Lamentablemente, no han podido dar con ningún rastro, ya que se cuentan con pocas especificaciones. Javier Salazar, sheriff del condado de Bexar señaló a CBS la dificultad que representa localizar un camión cisterna blanco en una ciudad tan grande y con acceso a varias carreteras.
A la vez, reveló que las llamadas fueron desgarradoras y dejaron a los operadores del servicio de emergencia visiblemente conmovidos y consternados.
Los esfuerzos no pararán hasta encontrar a las 80 personas migrantes reportadas. Por desgracia, no hay esperanzas de encontrarles con bien debido a la cantidad de días que llevan ahí.
DFC