SALUD Y BIENESTAR

3 hábitos que dañan tu salud sin que te des cuenta, después de los 60

Para vivir una longevidad sana, es vital implementar algunos buenos comportamientos y eliminar otros.

3 hábitos que dañan tu salud sin que te des cuenta, después de los 60
Longevidad, Hábitos, Salud Foto: Pixabay

Llegar a una longevidad plena es una tarea difícil ante la fragilidad del sistema inmune, reflejando exposición de distintos virus y bacterias. Para aquellos que están superando la barrera de los 60 años, es esencial consolidar algunos hábitos y erradicar otros, con el claro objetivo de mejorar la salud. Es que el adulto mayor ya no es tan fuerte y resistente como antes, por lo tanto deberá incrementar los cuidados para que su organismo responda de la mejor manera ante ataques externos.

En consecuencia, especialistas sostienen que no hay que poner el ojo en aquellas prácticas perjudiciales de público conocimiento como beber alcohol o fumar, sino hay que modificar los hábitos que pueden pasar inadvertidos y así alterar la calidad de vida sin que nos demos cuenta. Es por ello que te pondremos en foco de análisis algunos comportamientos que se deberán modificar para lograr una mejor longevidad.   

El primero de los hábitos que habrá que incorporar es la ingesta de proteína ya que ayuda a mantener la masa y fuerza muscular, la salud ósea, y es una de las mejores formas de ayudar con sus esfuerzos en la pérdida de peso. Esto se debe a que adultos mayores que viven en la longevidad tienen más riesgo de perder masa muscular, por lo que no ingerir suficientes proteínas podría acelerar el proceso. Por lo tanto habrá que incorporar más alimentos a la dieta como los huevos, el salmón, la carne de ternera, de pollo o de pavo (siempre a la plancha para que no contenga grasas malas).

Por otro lado, uno de los malos hábitos se resume en una vida sedentaria. Estas prácticas serán fáciles de corregir en la longevidad a través de ejercicios cortos como subir escaleras o caminar, sumado a una alimentación sana centrada en frutas, verduras y grasas saludables. En consecuencia, con estos pequeños cambios podrás vivir mejor.

Foto: Pixabay

Mientras que en tercer término, especialistas analizan que cuando el adulto se aproxima a la longevidad, comienzan los problemas de deshidratación. En este punto será fundamental implementar hábitos de hidratación, especialmente porque en esta edad la sensación de sed se reduce notablemente. Para gozar de una mejor salud, se sugiere beber entre dos y tres litros de agua diarios, lo que equivaldría a unos ocho o nueve vasos.

Foto: Pixabay

 

Temas