La sansevieria, también conocida como lengua de suegra, es una planta de interior con una extrema belleza, convirtiéndose en un ejemplar perfecto para el diseño de interior. Sin embargo también puede ser cultivada en el jardín ya que es una planta elegante que puede brindar una decoración soñada para cada parque en donde sea plantada.
Esta planta es originaria de África, aunque luego arribó a distintos países de América como México, Argentina y Chile, por ejemplo. La sansevieria se caracteriza por tener hojas verticales y erectas que pueden medir desde los 55 hasta los 120 centímetros de largo, mientras que de ancho puede medir hasta 12 centímetros. El ejemplar de jardín más frecuente es aquel de color verde oscuro con líneas transversales en una gama más clara del mismo verde.
Otro de sus nombres populares es la cola de serpiente. Y un dato particular es que, según estudios de la NASA, este ejemplar tiene una desconocida virtud: purifica el aire. En consecuencia, se recomienda colocar la lengua de suegra en habitaciones y ambientes cerrados. Inclusive puede eliminar compuestos tóxicos que se encuentran flotando en el aire y resultan ser perjudiciales para la salud.
El cuidado de la sansevieria no necesita grandes esfuerzos, ya sea si se encuentra dentro del hogar o en el jardín. En cuanto a la luz, la lengua de suegra crecerá de manera óptima en lugares donde el sol no impacte directamente en hojas. Por lo tanto, si está al aire libre, se recomienda que sea bajo la sombra.
Además, la lengua de suegra puede soportar largos periodos de tiempo en espacios sin luces, naturales o artificiales. Mientras que en caso de que se encuentre cultivada en el jardín, su temperatura perfecta será de 25º, aunque también soportará días de máximo calor y de temperaturas heladas. Por último, un detalle no menor es saber que el exceso de riego podría ser perjudicial para la sansevieria porque sus raíces se ahogan fácilmente.