El nombre de Sergio Andrade sigue resonando en la memoria colectiva de México, y ésto no se debe a su influencia en la industria musical, sino por la enorme sombra de abuso y manipulación que dejó a su paso. Este caso se convirtió en uno de los más estremecedores en la historia del entretenimiento mexicano y, a través de los años, ha provocado una gran movilización sobre la explotación y los derechos de las mujeres fuera de las cámaras, especialmente aquellas menores de edad que fueron víctimas de sus acciones.
Desde que la historia salió a la luz, las víctimas de Andrade, muchas de las cuales eran adolescentes y menores de edad en ese entonces, han tenido que lidiar con el impacto de años de abuso físico, psicológico y sexual. Pero además de esto, parecen haber quedado marcadas por la impunidad de la industria, que protegió hasta el último momento a su "Rey Midas" e intentó silenciar las voces de las víctimas.
Con el paso de los años, las mujeres han comenzado a hablar abiertamente de su experiencia antes, durante y después de los abusos ejercidos por Andrade. Fue así como a través del canal de YouTube "Alineate y Abre tus Alas", algunas de las mujeres que pasaron por estas violencias se reunieron en una llamada grupal para compartir sus experiencias y reflexionar sobre sus vidas después de haber escapado del control y abuso del productor musical.
Víctimas de Sergio Andrade recuerdan cómo fue su primera Navidad en libertad
A través de una videollamada, Karla de la Cuesta, Karola de la Cuesta, Aline Hernández, Marlene Calderón, Liliana Regueiro y Guadalupe Carrasco se reunieron para hablar no sólo del sufrimiento a que fueron sometidas por Andrade, sino también para compartir la felicidad que les brindó la posibilidad de tener una vida más allá del abuso.
Y es que después de pasar años sometidas a un control y manipulación total, las mujeres ahora se encuentran en un lugar de recuperación en donde las cicatrices aún son visibles. Fue así como Aline habló para las demás y recordó cómo fue su primera Navidad después de haber sobrevivido a las violencias de Andrade:
No tenía palabras de estar con mi familia, durmiendo en mi cama, recibiendo regalos. Esa navidad fue muy importante para mí, declaró Aline.
Para ella, esa Navidad representó la primera vez en años que experimentó lo que significaba una celebración familiar genuina, lejos de las manipulaciones y abusos; y en medio de los recuerdos y los escalofríos que todavía llegan al recordar esa época, Marlen Calderón también recordó aquella época:
Como saben yo me escapé, me regresan [...] cuando se da esto que Karina tiene que viajar a México, yo asi de ‘yo voy’, fue uno de los privilegios que me concedieron. La pasé en la cárcel, pero rodeada de mi familia, mi papá, mis hermanos, fue una navidad muy bonita porque después de nueve años estaba con mis padres, recordó Marlen.
Karola de la Cuesta, por su parte, reflexionó sobre cómo esa Navidad le permitió darse cuenta de que finalmente era un “alma libre” y detalló que la fecha coincidió con la salida de una de sus hermanas de la cárcel, lo que marcó un momento de reencuentro y liberación para toda su familia, sabiendo que por fin esas cadenas que las violentaban habían sido rotas para no volver a traparlas jamás.
Fotografía: YouTube/Alineate y abretusalas.
Pero uno de los testimonios que estremeció a las y los espectadores fue la de Liliana Regueiro, quien recordó como esa primera Navidad lejos de Andrade representó un momento de liberación personal ya que esta fecha fue el inicio para reconstruir su vida y sanar las heridas emocionales que había arrastrado durante años de abuso. Y también explicó la inmensa felicidad al disfrutar de la comida después de muchos años de remordimiento.
Fue especial porque fue la vez que te sentías libre de comer sin tener remordimiento, ver a la familia unida, la que siempre faltaba yo, por la que siempre lloraban era yo, sí fue muy especial, dijo Liliana Regueiro.
La historia de Sergio Andrade y su red de abuso
Sergio Andrade, originario de México, fue conocido por ser el mentor y productor de la cantante Gloria Trevi, quien a su vez fue una de las figuras más emblemáticas de la música pop latinoamericana en la década de 1990. Sin embargo, Andrade tenía una posición de poder indiscutible que utilizaba para manipular a jóvenes y menores de edad, ofreciéndoles una carrera en la música, pero que a cambio exigía el cumplimiento de sus deseos y fantasías, muchas de ellas de naturaleza sexual y coercitiva.
A lo largo de los años, las víctimas de Andrade han hablado abiertamente sobre el control al que fueron algunas, el abuso sistemático que sufrieron y cómo todo esto se desarrolló bajo la fachada de un mundo glamoroso y lleno de luces, música y fama. Entre las víctimas más conocidas se encuentran Karla de la Cuesta, Karola de la Cuesta, Aline Hernández, Marlene Calderón, Liliana Regueiro y Guadalupe Carrasco, quienes se han convertido en figuras centrales en la lucha por la justicia en este caso.
Fotografía: Sergio Andrade.
El modus operandi de Andrade era el mismo: engañar a las jóvenes con promesas de un futuro brillante, un lugar en el mundo de la música y una vida llena de oportunidades, pero lo que comenzaba como una ilusión de éxito, rápidamente se transformaba en una pesadilla de manipulación y abuso. Pues el productor se encargaba de aislar a sus víctimas de sus familias y amigos, controlando cada aspecto de sus vidas y si alguna de las chicas mostraba signos de rebelión o intentaba escapar, Andrade recurría a amenazas, violencia física y psicológica, lo que hacía casi imposible que ellas pudieran huir.
Aunque las víctimas de Sergio Andrade han hablado abiertamente sobre su sufrimiento y las consecuencias emocionales de su abuso, el camino hacia la justicia ha sido largo y complicado. A pesar de las múltiples acusaciones en su contra, el proceso judicial ha estado marcado por controversias, con varios recursos legales interpuestos por los acusados para evitar ser sentenciados. En la actualidad, aún existen casos legales pendientes tanto en México como en Estados Unidos, donde varios de los involucrados en la red de abuso se enfrentan a cargos graves.
Hoy, a más de dos décadas de los primeros crímenes relacionados con Sergio Andrade, las mujeres que fueron víctimas de este agresor continúan buscando sanar sus heridas y recuperar el control sobre sus vidas. Su historia, aunque llena de dolor, también es un testimonio de resiliencia y esperanza para todas aquellas personas que luchan contra el abuso y la explotación.
Fotografía: YouTube/Alineate y abretusalas.
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