La tarde de este miércoles 22 de febrero la pareja conformada por Andrea Legarreta y Erik Rubín decidieron ponerle punto final a su relación de una forma madura y como pocos lo hacen. A través de sus redes sociales compartieron un comunicado donde explicaron que tras meses de pensarlo, decidieron tomar caminos diferentes sin dejar de lado todo lo que construyeron juntos: una familia y una sociedad por las empresas que levantaron.
"...no es un pleito, no existe nada malo, ni turbio y la única razón es la transformación del amor en pareja…Ellas (sus hijas Mia y Nina) tienen la certeza de que toda la vida seremos sus padres que las aman, respetan y apoyan por sobre todas las cosas. Seguiremos compartiendo vida juntos y en familia. Seguimos siendo socios de nuestras empresas y tenemos planes de trabajar juntos en proyectos que ya compartiremos...", se puede leer en la misiva que publicaron.
Aunque Andrea Legarreta y Erik Rubín son reconocidos por los televidentes de varias generaciones, no muchos conocían que, además de haber compartido una vida como esposos (llegaron al altar en el año 2000) también decidieron asegurar su economía con la creación de algunos negocios; uno de ellos es una cadena de gimnasios de nombre "Commando".
Los negocios de Andrea Legarreta y Erik Rubín
Quienes siguen a la pareja en Instagram, ya se dieron cuenta de que ambos son muy responsables en todo lo referente a su vida y cuidar su salud es algo de relevancia para ellos. Por esta razón es que Andrea Legarreta y Erik Rubín crearon el gimnasio "Commando", el cual ha tenido éxito con el paso del tiempo llegando a tener 9 sedes en diversas ciudades de México.
"“Estamos emocionados, agradecidos y felices de seguir con este sueño de llevar a la gente la oportunidad de elegir una vida más saludable de una forma increíble. Gracias a toda la familia Commando, que en todas las áreas dan lo mejor de sí para que nuestros clientes se sientan también parte de la familia", escribió Andrea Legarreta en sus redes sociales cuando inauguraron el gimnasio.
Por otro lado, Erik Rubín habló en el 2018 de la colección de sombreros, accesorio que no suelta en cada una de sus presentaciones, para poner a la venta. Durante una entrevista para De Primera Mano, explicó que la idea era vender las piezas, que tienen la particularidad de ser únicas. El proyecto estuvo respaldado por Andrea Legarreta desde el principio.
De igual manera, en el año 2020, Erik Rubín estuvo de manteles largos tras anunciar el inicio de Rubik Music, negocio que puso junto con el productor Dr. Alafaro, a quien conoce desde hace muchos años. Su casa tiene un espacio dedicado al estudio de grabación, donde destaca por las consolas y aparatos musicales.
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