Durante las últimas semanas, han salido a la luz diversos rumores sobre la vida de la famosa cantante y actriz mexicana Thalía, quien se ha consolidado como una de las figuras mexicanas más queridas dentro del gremio artístico.
Pero también, se ha generado polémica sobre su vida privada, específicamente sobre sus relaciones amorosas, las cuales han generado, desagrado e incluso especulaciones.
Thalía Sodi es una de las celebridades mexicanas más reconocidas en Latinoamérica debido a su trayectoria como actriz y cantante. La también empresaria inició su carrera a principios de los años 80, como vocalista de un grupo infantil y no fue hasta 1986 que se integró a Timbiriche, oportunidad que le valió posicionarse como una promesa de la música. A pesar de que se separó de la banda años más tarde, Thalía no se alejó del espectáculo.
Sobre la vida privada de Thalía
Una vez lanzado su disco como solista, Thalía también participó en serie telenovelas, dos películas y una obra de teatro. Además, de vender millones de discos, sus personajes protagónicos han sido admirados por las personas de 180 países. Tal ha sido su fama que es considerada la actriz mexicana de telenovelas más importante en el mundo. Sin embargo, además de su fama y su popularidad, Thalía también esconde algunos secretos.
Una de las situaciones más polémicas a las que se enfrentó la actriz fue su relación con Alfredo Díaz Ordaz, el hijo menor del presidente Gustavo Díaz Ordaz. Después de que Thalía se convirtiera en una figura importante gracias a la banda Timbiriche, la cantante comenzó a relacionarse con la familia presidencial y entabló una relación con Alfredo, quien ya era padre de dos hijas, concebidas durante su matrimonio.
Su relación con Alfredo Díaz Ordaz
Alfredo fue el productor responsable de lanzar la trayectoria de Thalía como solista, pues fue el hombre detrás de su primer disco y quien impulsó su carrera musical. El hijo del expresidente le llevaba 20 años de diferencia a la joven Thalía, quien estaba perdidamente enamorada de él, según diferentes testimonios.
La relación era tan formal que el mismo Alfredo le pidió matrimonio con un anillo considerado como reliquia familiar, sin embargo, la boda jamás pudo realizarse debido a que Alfredo Díaz Ordaz murió a causa de una hepatitis en 1993.
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