Un cuerpo de infarto es el que presume María Fernanda Guzmán en sus redes sociales y no es para menos; con una belleza única y unas curvas de infarto, la guapa expareja de Christian Nodal sigue ganando seguidores por miles en Instagram y ya es considerada toda una influencer.
Aunque es muy poco lo que se sabe de la guapa joven que alguna vez derritió el corazón del famoso cantante, María Fernanda se ha convertido en la sensación en las redes, al igual que la mamá y la hermana del artista regional mexicano. Incluso hay quienes aseguran que la belleza de la joven es mayor que la de la actual novia de Nodal, Belinda, a quien aseguran ha desbancado.
Lo que si bien es cierto es que tanto Belinda como María Fernanda tienen lo suyo y no dudan en presumirlo con sus seguidores; ya que es precisamente en Instagram en donde suelen compartir más imágenes en donde muestran sus atributos, su escultural cuerpo y sus curvas de infarto.
Una belleza que deslumbra como el sol
En una de las tantas fotografías que María Fernanda Guzmán ha publicado en su Instagram aparece posando con un sombre y un vestido amarillo, por lo cual fue comparada con el sol, por su radiante belleza. En la postal la joven influencer aparece sonriente y con un maquillaje muy tenue que le hizo destacar sus facciones y su melena rubia.
En otras de las fotografías se ve posando en traje de baño, a la orilla de la playa y en compañía de sus amistades. No cabe duda que sabe cómo pasarla bien y disfrutar de momentos inolvidables acompañada de las personas que le importan. De acuerdo con los rumores que la prensa recopiló, María Fernanda y Nodal habrían terminado su relación sentimental a finales del año pasado, sin embargo ninguno de los dos confirmó la separación.
Aunque María Fernanda no es tan activa en sus redes como otras influencers, suele complacer a sus miles de seguidores con espectaculares postales en donde enseña sus atributos. Con las fotografías, la joven enloquece a sus fans, quienes no dudan en comentar sus estados, admirar su belleza, enviarle saludos e incluso piropos. Hay quienes incluso le recuerdan a Nodal el monumento de mujer que dejó ir.