Entre 2017 y 2021, las energías limpias pasaron de 21 a 27 por ciento dentro de la matriz de generación de electricidad en el país, sin embargo, aún están por debajo de las metas de la Ley de Transición Energética, y se requieren inversiones de por lo menos 68 mil 800 millones de pesos por año, para alcanzar el objetivo de 35 por ciento en 2024, según datos de las asociaciones mexicanas de Energía Solar (Asolmex) y Eólica (Amdee).
La inversión que México necesita para instalación de más capacidad de fuentes limpias supera al presupuesto de 48 mil millones de pesos que se aprobó para la UNAM en 2022, y también serviría para financiar hasta 83 por ciento del aeropuerto Felipe Ángeles, que se construye en Santa Lucía.
Si bien las energías limpias han ganado terreno dentro de la generación de electricidad, en 2021 la meta establecida asciende a 30 por ciento, pero el resultado observado estuvo 3 por ciento debajo del objetivo, señalan los datos de las cámaras empresariales.
Nelson Delgado, experto de la industria eléctrica, afirmó que el país debe redoblar las inversiones en energías limpias, para hacerle frente al cambio climático y cumplir con los compromisos internacionales para evitar el alza en la temperatura global.
“Las políticas climáticas de México son altamente insuficientes para limitar las emisiones hacia 2030 y contrarias a los compromisos del Acuerdo de París”, dijo.
Diego Rasilla, experto de Engie Energy, opinó que nuestro país requiere de una matriz de generación con objetivo social, que contemple el impacto en el cambio climático de largo plazo.
“Es imperativo encontrar una congruencia entre energía, desarrollo y medio ambiente”, añadió.
CAR