Wayne Rooney y Jamie Vardy compartirán rectángulo judicial y no dentro de un campo de juego. Es que las esposas del actual entrenador del Derby County y del atacante del Leicester tendrán que enfrentarse en un juicio que incluye un escándalo mediático. La situación mantiene en vilo a la prensa británica, quienes bautizaron el sucedo como el “Wagatha Christie”.
Todo comenzó cuando Wayne Rooney manejaba alcoholizado en 2017, según detallan medios ingleses, y fue aprehendido por la policía. El hecho se mantuvo bajo candado, pero alguien filtró la información a la prensa. En consecuencia, el actual entrenador y el delantero de los Zorros tendrán que encontrarse en un juicio oral y público, ya que la persona que filtró el suceso es la esposa de Jamie Vardy.
El denominado “Wagatha Christie” en alusión al término “Wags”, acrónimo que refiere a las esposas y novias de los futbolistas de Inglaterra, comenzó el pasado lunes 9, cuando Coleen McLoughlin de Rooney, de 36 años, y Rebekah Miranda, de 40 años, y esposa de Vardy, iniciaron el juicio también calificada como “La guerra de las Wags”.
Es que tras una publicación del diario The Sun, la esposa de Wayne Rooney acusó a la mujer del goleador del Leicester de filtrar información íntima, puntualmente del momento en el que la policía encontró a Rooney conduciendo alcoholizado y junto a una mujer, hace un lustro. El reporte indicó que la señora Rooney sospechó de la pareja de Jamie Vardy como fuente de la prensa inglesa y de filtrar datos privados, dado que ambas compartían una estrecha amistad.
Ante esta situación, tanto Jamie Vardy como su esposa reclaman una compensación de tres millones de euros por difamación, elevando el caso a la Alta Corte de Londres. Aunque la mala noticia para la esposa de Vardy es que la defensa de Coleeen logró en el inicio de la disputa que Rebekah admitiera haber compartido con su agente el perfil privado de Instagram de la pareja de Wayne Rooney.