VIDA DE GATO

¿Los gatos negros dan mala suerte?

Desde la Edad Media, algunas supersticiones le han dado una mala fama a los gatos negros que, sin embargo, no es compartida en todo el mundo

CULTURA

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Los gatos negros son considerados de buena suerte en muchas culturas.Créditos: Ángela Méndez

El poeta británico Lord Byron decía que allí donde no nos alcanza el intelecto nacen las supersticiones. Y aunque el mundo de lo sobrenatural es un espacio por explorar, existen ciertas costumbres y tradiciones que vienen precisamente de ese desconocimiento.

Romper un espejo, tirar sal en la mesa o incluso pasar por debajo de una escalera, son supersticiones que tienen que ver con el desperdicio de bienes considerados caros. Sin embargo, las supersticiones alrededor de los gatos negros tienen un origen distinto.

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Siempre asociados con las brujas o el advenimiento de la muerte, los gatos negros fueron severamente perseguidos por siglos, tanto en Europa como en Estados Unidos, lo que incluso casi lleva a su extinción.

Pero si algo han comprobado siglos y siglos de convivencia con estos enigmáticos seres, es que no dan mala suerte: de hecho, en algunas culturas su significado es completamente el contrario, siendo no solo de buena suerte, sino útiles para pronosticar el clima.

Mala suerte… para los gatos

La relación entre los gatos negros y la hechicería nació durante la Edad Media, cuando se creía que eran los acompañantes nocturnos de brujas y hechiceras, o ya de plano emisarios de Satanás que vigilaban los sueños de las personas.

En algunos casos, como durante los juicios por hechicería de Salem, Massachusetts, se decía que incluso eran o bien brujas transformadas o hechiceras castigadas por el mismísimo Diablo con esa forma felina.

Durante siglos, los gatos negros fueron relacionados con la hechicería. Foto: José Arrieta

Por esta razón, millones de gatitos negros fueron quemados, mutilados y asesinados durante los más de 400 años que duró la Edad Media en Europa y en los primeros siglos de existencia de la Unión Americana.

Irónicamente, la matanza de estos y otros gatos, relacionados con estas prácticas, sí trajo la muerte en Europa: al no contar con un depredador natural, la población de ratas comenzó a aumentar de tal forma que la peste bubónica y la peste negra acabaron con una buena parte de la población europea continental.

Felinos de muy buena suerte

Sin embargo, no en todo el mundo los michis negros son considerados de mala suerte. De hecho, casi en todas las islas británicas, con excepción de Inglaterra, los gatos de este color son considerados de buena suerte. En Escocia, por ejemplo, si un gato negro se asoma a tu puerta significa que vas a tener buena suerte el resto del día y si ves un pelo blanco entre su pelaje oscuro significa que te está dando protección ilimitada.

Cerca de allí, en Gales, los gatos eran los encargados de la meteorología siglos antes del desarrollo de esta ciencia. Si el michi se sentaba frente al fuego, nevaría, si comenzaba a acurrucarse, era signo de mal tiempo. Allí nació el mito de las nueve vidas del gato y más aún, se dice que eran los últimos que se despedían del alma de las personas que morían.

En el Reino Unido, tener un gato negro en casa es considerado de buena suerte. Foto: José Arrieta

En Irlanda, los pescadores solían cargar gatos negros en las embarcaciones para asegurar que volverían con bien a sus casas, mientras que sus esposas solían esperarlos también con michis de esa tonalidad porque se dice que nunca se abandonan.

También están relacionados con el amor. Regalarle un gato negro a una novia en Inglaterra implica un matrimonio feliz, mientras que para la cultura japonesa ver un gato negro en la calle supone que pronto conocerás al amor de tu vida.