INDUSTRIA EDITORIAL

Industria editorial en México registra caída de 25% en ventas de libros

Fue el país de Latinoamérica que resultó más golpeado en pandemia

CULTURA

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NÚMEROS. Hasta el tercer trimestre de 2021, la industria facturó 8 mil 800 millones de pesos. Foto: Adriana LunaCréditos: Foto: Adriana Luna

Ningún país de Latinoamérica resultó tan golpeado durante la pandemia de COVID-19 como México, principalmente por el nulo apoyo gubernamental al libro y su cadena, lamenta la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (CANIEM). Se desplomaron las ventas casi 25 por ciento, es continentalmente, la caída más severa.

“La caída que sufrió el mercado en México fue probablemente la mayor de América Latina, equivalente a la que cayó Perú, pero todo el resto de países aguantó mejor el efecto de la pandemia que México”, subrayó José Calafel, Consejero delegado de la División Latinoamérica de Grupo Planeta y Vicepresidente del Sector de Libros de la CANIEM.

Se dejaron de facturar dos mil 764 millones de pesos el año pasado. La situación se complicó con el cierre de librerías y de escuelas. También se ha notado una disminución en la venta de libros en los supermercados del país.

“Impacta la actitud que se tuvo en México hacia los libreros y las librerías que fue prácticamente nula, cosa que en otros países no pasó porque hasta se declaró al libro como un bien (esencial) como en el caso de Argentina y eso ayudó a paliar la situación. Estos son factores coyunturales. Pero lo que nos preocupa son los factores estructurales, nuestro mercado, nuestro canal es inmaduro tiene que perfeccionarse desde diversos puntos. El país que soportó mejor los efectos de la pandemia fue Chile, con muchísima diferencia, siendo un mercado de 20 millones de habitantes contra los 120 millones de habitantes que tiene México. En Chile el libro penetra en varios canales de distribución en forma madura, eso no sucede en México”.

A pesar del desplome, en abril comenzó la recuperación para la industria con la reapertura de los puntos de venta. Se espera el cierre de este año con 35 por ciento de aumento, pero la real recuperación sigue siendo magra porque la caída en las ventas del 2020 en comparación con el 2019 rondó también el 35 por ciento.

“Vamos a ver un rebote por los efectos interanuales. Hasta el tercer trimestre del 2021 ya tenemos una facturación acumulada de 8 mil 800 millones de pesos, ya estamos superando los montos que teníamos en 2020. El pronóstico para el último trimestre del 2021 es una venta de 3 mil 100 millones de pesos. Lo que estamos pensando que vamos a tener un incremento en 2021 de 35 por ciento frente a todo lo que fue el 2020. Es este efecto de estar cerrados y sin operar, tenemos un rebote, sí tenemos un aumento pero tiene que ver con los decrecimientos que tuvimos”, detalló Ignacio Uribe Ferrari.

El presidente de CANIEM, Juan Luis Arzoz Arvide en entrevista con El Heraldo de México lamentó que sólo en discurso el libro sea esencial “la esencialidad tenía fecha de caducidad al 31 de diciembre, nunca lo entendimos. El 31 de diciembre cerraron todas las librerías de nuevo y abrieron hasta marzo, fueron unas pérdidas terribles, enormes. Y lo peor, cuando levantamos la voz ni nos pelaron”.

Aunque las librerías con libros en físico estuvieron paradas, el incremento de venta del libro electrónico fue poco, representa el 4 por ciento.

Cuatro de cada diez personas (alfabetas) leyeron un libro durante el año pandémico (en el sector mayor de 18 años), según datos proporcionados por el Inegi. En comparación al año 2019 esto representa un dos por ciento de incremento.

El 73 por ciento de los lectores lo hace en formato impreso; 5.6 por ciento lee en formato impreso y digital; mientras que 21.5 por ciento lee solo digitalmente, muchos en sus teléfonos inteligentes. Se ve un aumento entre los lectores en formato digital en 2021 con respecto al 2020.

Destaca el caso de Argentina que cuenta con una ley que protege al libro y a la industria editorial.

“Una ley clarísima que establece el precio fijo. Los libreros compiten en las mismas condiciones, sacaron la casta con ofertas en e-comerce. Aquí hay un aprendizaje, decididamente tenemos que apoyar a la industria editorial en México, no queda más remedio. Vamos a estar sujetos a esos vaivenes si no fortalecemos el canal librero. Hay que apoyarlo con ideas concretas y la primera es fortalecer la ley de precio único, sin él, las librerías independientes ¡no tienen futuro!”.

CAR