El INEGI dio a conocer que durante la segunda quincena del mes de julio el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) aumentó 0.74% respecto al mes anterior, con este resultado, la inflación general anual se colocó en 8.15%, el nivel más alto de los últimos 22 años. Frente a este escenario sectores como el de la industria panificadora han aumentado sus costos de producción, sin que ellos puedan hacer lo mismo con sus precios al público, porque simplemente dejarían de vender.
El panadero Miguel Cortez, quién es proveedor de importantes cadenas de comida en Aguascalientes está consciente de que la guerra en Ucrania es un importante factor en la escalada de los precios y es el principal responsable del incremento de lo que hoy cuestan los granos, principalmente el trigo. Aunque el panadero recordó que hasta hace poco un costal de harina antes costaba 350 pesos y hoy lo compra en casi mil pesos; mientras que una caja de levadura que antes tenía un costo de 380 pesos y hoy roza los 800; es el mismo caso de otros insumos como la azúcar.
Desde su panadería ubicada en la calle Córdoba en el fraccionamiento Rodolfo Landeros, Miguel Cortez hace lo posible para amortiguar los duros golpes de la inflación y no tener que aumentar en la misma medida el precio de su pan, que ya de por sí lo aumentó en un 10%. Don Miguel señaló que la pandemia es otro de los factores determinantes, la cual además lo dejó algunos meses sin trabajar debido a que adquirió la enfermedad provocada por el COVOD-19, y además le causó el despido de varios de sus empleados.
A pesar de que las panaderías representan una de las industrias más grandes del procesamiento de alimentos, los altos costos de producción están causando estragos en el sector.
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