A cuatro meses del paso del devastador huracán Otis, Acapulco vive un renacimiento vibrante. El Abierto Mexicano de Tenis, en su edición 31, se alza como un símbolo de esperanza y recuperación.
“Hemos trabajado tanto tiempo y hemos hecho mucho esfuerzo, todos han sido testigos de lo que hoy se hace realidad, de lo que hoy estamos logrando por Acapulco y más allá de eso, por la reconstrucción y la activación económica de un Guerrero que lo necesita”, comentó el director del torneo, Álvaro Falla.
El torneo genera un impacto económico significativo en la ciudad. Durante años se ha convertido en un símbolo de unidad para la comunidad acapulqueña. Tras el paso del huracán, el evento ha servido como un catalizador para la recuperación del puerto, uniendo a las personas en un sentimiento de esperanza y optimismo.
“Estar en contacto con la gente de Acapulco me ha dejado mucho. Es un compromiso de la gente con su espacio de trabajo y es el mismo compromiso mío y del equipo”, nos compartió la CEO de Grupo Pegaso, Renata Burillo.
En una final vibrante, Álex de Miñaur venció al noruego Casper Ruud consiguiendo ser bicampeón del Abierto Mexicano de Acapulco.
El mejor torneo en su categoría durante muchos años. Se ha consolidado como uno de los eventos deportivos más importantes de Latinoamérica, y su impacto positivo en Acapulco es innegable. El renacimiento del puerto está en marcha, y el Abierto Mexicano de Tenis juega un papel fundamental en este proceso.
LOS DETALLES
El importante torneo de tenis se vivió del 26 de febrero al 2 de marzo y se llevó a cabo en la Arena GNP Seguros en el bello puerto.
Los asistentes disfrutaron de partidos de gran nivel, eventos musicales, gastronómicos, culturales y la icónica fiesta de blanco.
Por Redacción
Fotos: JDS Agencia
MAAZ