El tianguis de la Lagunilla se ha convertido en un referente cuando se trata de buscar artículos a menor costo, pero además de la gran variedad de objetos nuevos y antigüedades que existen en este lugar, el mercado también se ha caracterizado por una infinidad de opciones en cuanto a comida y bebida; las personas que buscan chacharear entre de las calles hacen también una pausa para dejarse llevar por el olor a comida que inunda el lugar, obligando a las y los compradores a hacer una pausa para llenar sus estómagos con las mejores garnachas callejeras.
Cada domingo, desde la calle Comonfort hasta Matamoros, el tianguis de La Lagunilla es visitado por cientos de personas que, aunque parecen no tener nada en común, los une el antojo de la comida mexicana que ahí mismo se prepara. Según el testimonio del canal La Ruta de la Garnacha, llegando al Eje 1 el olor a tacos de cecina, bistec y arrachera inmediatamente capta la atención de las y los transeúntes que, hambrientos, sostienen sus platos calientes.
Entre tacos, bebidas y mucha gente
En los clips de La Ruta de la Garnacha la taquería “El Taquin” se lleva un reconocimiento especial ya que con un horario de 9:00 am a 6:00 pm, su menú conformado por tacos de cecina, pechuga, suadero, bistec, longaniza, campechanos, entre otros, se han convertido en un indispensable dentro del tianguis ya que no sólo son famosos entre los visitantes más recurrentes, sino que además llevan poco más de 26 años de antigüedad.
Las lonas de colores, los bancos de plástico y las mesas largas en donde desconocidos se convierten en cómplices de la taquiza se ven acompañadas de las rápidas manos de quienes atienden cada local; el flujo de gente es constante y esto es un indicador de la calidad de los tacos, un ejemplo de ello son los tacos de cochinita y panuchos que se encuentran cerca de la calle Comonfort y, según la experiencia de La Ruta de la Garnacha, el reconocimiento dado por los consumidores es la mayor prueba de calidad.
Calificados como “los mejores tacos de la zona”, la receta de aquellos es preparada por doña Bertha, quien guarda celosamente los ingredientes exactos que componen el sazón de la cochinita y afirma tener más de 30 años preparándola para venderla en cada domingo de tianguis y aunque con el paso de los años la fama de los tacos ha crecido, ella continúa dirigiendo a sus trabajadores que atienden cada una de las mesas.
Quesadillas con la matriarca
Además de tacos, en la entrada del tianguis también se encuentra el puesto de La Matriarca, fundado por la señora María Luisa quien lamentablemente falleció hace algunos años, pero que dejó un legado familiar que, a pesar de su ausencia, han podido mantener, convirtiéndolo en “el mejor lugar para comer quesadillas en el tianguis”.
Fundado como un negocio familiar, La Matriarca se encuentra llevada por familiares de la señora María Luisa, a quien no le importaba el lazo sanguíneo y acogía a todos como un miembro más de la familia, convirtiendo esta herencia garnachera en un símbolo de unión y reconocimiento.
Café turko, la magia de la arena
En el tianguis de La Lagunilla no sólo se encuentra comida, sino que además puedes conocer cómo es el café turko a tan sólo 30 pesos. Con guantes negros y acompañado por la música que ambienta el tianguis, el hombre encargado del café le explica a La Ruta de la Garnacha que esta bebida es condimentada con cardamomo, jengibre, anís, canela, clavo y comino, especias que fueron probadas por el barista encargado de prepararla y es por medio de arena caliente como todo esto se fusiona, él afirma que ésta funciona como un baño María que envuelve la pequeña taza de cobre, teniendo como resultado la emulsión del agua.
Con un carrito en donde se transporta el espectáculo cafetero, el barista presume haber recorrido el mundo con una bicicleta y llevar dos años llenando de esta bebida al tianguis de La Lagunilla mientras lo recorre en busca de personas que, como él, aman el café y terminan maravilladas por la combinación mágica de aquellas especias.
Tacos de tuétano, un manjar olvidado
Casi al final del tianguis se encuentra el Asador Gaucho, un puesto con mesas rojas en donde los tacos de tuétano y la comida argentina llaman la atención de cientos de personas que abarrotan el lugar; con una fusión entre comida argentina y sazón mexicano este local comienza a preparar los pedidos dominicales desde las 11:00 am hasta que el último taco de tuétano es consumido por quien tuvo la suerte de alcanzarlos.
A su alrededor también se puede encontrar puestos de micheladas, azulitos y mojitos que son usados para bajar la pesadez del recorrido garnachero, y si bien está prohibido consumir alcohol en vía pública, el tianguis se ve delimitado por una especie de inmunidad, por lo que podrás disfrutar de una buena cerveza en compañía de música que te hace querer bailar mientras sostienes tu bebida, convirtiendo también al tianguis de La Lagunilla en un espacio divertido en donde la comida y la bebida jamás hará falta.
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