Como cada año, la llegada de septiembre ha sido motivo de grandes expectativas por parte de la población a nivel internacional, debido a las transformaciones que se presentarán durante el noveno mes del año. De acuerdo con la numerología, el número nueve es el fin de un ciclo, lo que se representa a la perfección con el fin del verano; pero también el inicio de algo importante, lo que se comprueba con la llegada de la Luna llena, que marca el inicio de las cosechas. Durante septiembre de 2021, las personas podrán experimentar grandes cambios y atestiguar dos de los fenómenos más importantes de esta segunda mitad del año.
Luna de Maíz
La Luna llena de septiembre recibe este nombre gracias a las personas nativas de América del norte, quienes asociaban esta fecha con la temporada de cosecha, pues era el momento en el que recolectaban los cultivos de maíz, frijoles, arroz y calabazas. Otro de los nombres que recibe este fenómeno es la "Luna Rutting", pues en septiembre los alces comienzan a frotar el terciopelo de sus astas como preparación de la temporada de apareamiento.
La Luna llena de septiembre es la más cercana al equinoccio de otoño, lo que permite que este mes se asocie con el comienzo de las cosechas en el hemisferio norte del planeta. Este año, la luna llena de septiembre se podrá observar durante el día 20, cuando esté en su máximo esplendor. También es conocida como la última Luna llena del verano, por lo que se le atribuye una energía especial. Al ser un fenómeno global, puede observarse desde cualquier punto, siempre y cuando la nubosidad en el cielo lo permita.
Equinoccio de otoño
Cuando el verano llega a su fin, parece que las noches se vuelven cada vez más largas en el hemisferio norte. Este 2021, la llegada del otoño ocurrirá el 22 de septiembre y el equinoccio ocurrirá exactamente a las 14:20 horas. Sin embargo, en el hemisferio sur, esta fecha marcará el inicio de la primavera. Cabe recordar que los equinoccios ocurren dos veces al año y se definen de esta manera debido a que es durante estos momentos cuando el día y la noche tienen la misma duración, pues es cuando el sol se encuentra en el ecuador del planeta.
Por lo tanto, el origen de las estaciones se debe a que, mientras la tierra traza su órbita, los hemisferios se inclinan, por lo que están más cerca o lejos de los rayos del sol. Igual que en el caso de los solsticios, los equinoccios marcan un cambio de estación y han sido estudiados a lo largo de miles de años por diferentes culturas. En el caso de México, por ejemplo, los mayas diseñaron la pirámide conocida como "El Castillo", en Chichen Itzá, donde cada equinoccio la luz solar forma una serpiente.