La pandemia por Covid-19, continúa siendo el principal problema de las administraciones nacionales en todo el mundo, la visión respecto a lo que se tiene o puede hacer es muy distinta entre quienes creen que hay que aplicar ‘testeo’ masivo y confinar a la población, pasando por quienes ponen por delante la recuperación económica para retomar una ‘normalidad nueva’ y otros que dejan en manos de la población la decisión sobre su cuidado en un panorama en el que hasta ahora no hay una solución única aplicable para todos los pueblos del mundo.
Sin embargo, en lo que todos coinciden es en la necesidad de proteger a la población que integran sus estados, la apuesta por vacunar al mayor número de pobladores para aminorar (solo aminorar) los efectos del virus del Sars-CoV2, es la estrategia correcta a la par del trabajo científico que busca por todos los medios encontrar tratamientos eficaces para estabilizar a los pacientes que presentan cuadros graves y en un futuro, vivir con el virus pero de manera que no ponga en riesgo la vida.
En este contexto, la carrera por la vacunación es un tema que lejos de ser equitativo, se ha convertido en terreno de batalla para quienes han podido sufragar y llegar a los acuerdos necesarios para obtener los biológicos, y por otro lado están los países que dependen de las donaciones de instrumentos como Covax (programa de colaboración para un acceso equitativo mundial a las vacunas contra el Covid-19), operado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La OMS impulsó en 2020 una coalición conformada por 172 países para acelerar la búsqueda de una vacuna y al mismo tiempo apoyar para que las cadenas de producción fueran eficientes en la entrega de biológicos para todos los países que así lo requirieran, 2 mil millones de vacunas para distribuirse de forma equitativa, sin embargo, en este 2021 las cosas no han sucedido como se tenía previsto.
La OMS mantiene atrasos muy importantes en las entregas de vacunas, el esfuerzo es encomiable, pero los retrasos e han hecho evidentes en los países que más lo requieren, y a los que las vacunas llegan apenas por racimos en comparación con los países del primer mundo en los que se producen, compran y reciben millones de lotes, incluso más de lo que necesitan a su población.
Mientras en Haití, la nación más pobre del continente americano y actualmente azotada por los efectos de un terremoto, apenas se han aplicado más de 20 mil vacunas para una población superior a los 11 millones de habitantes, apenas arriba de un 2.5 por ciento de la totalidad.
En tanto, en Portugal, con una población superior a los 10 millones de personas, el gobierno tiene cubierto a más del 80 por ciento de su población con al menos una dosis.
La desigualdad es palpable y además también hay que tomar en cuenta el aspecto político que no está aislado de la crisis sanitaria, mientras que en Europa y Norteamérica, las farmacéuticas y los laboratorios han hecho su trabajo para proveer de las vacunas a esos países, en Asia y Latinoamérica se abrió el mercado para las farmacéuticas chinas y para el Instituto Gamaleya de Rusia.
¿Quiénes han vacunado más población en el Mundo?
El primer lugar como mencionamos párrafos atrás, es Portugal, con más del 80 por ciento de su población vacunada con al menos una dosis y más del 67 por ciento con esquema completo.
Le sigue Qatar con un porcentaje de vacunación superior al 78 por ciento de una población mayor a los 2 millones de habitantes, y con más del 68 por ciento con esquema completo.
En tercer lugar aparece Singapur, que ocupa el mayor porcentaje de esquemas completos con más del 74 por ciento de su población cercana a los 6 millones y un porcentaje total de inoculación cercano al 80 por ciento.
En cuarto sitio aparece Uruguay, la primera nación latinoamericana que está en el top ten mundial, con más del 76 por ciento de inoculación completa para sus cerca de 3 y medio millones de habitantes.
En tanto, España lleva un porcentaje superior al 75 por ciento, Dinamarca cuenta con un porcentaje similar, pero menor en las aplicaciones de dosis completas.
Chile, que durante el inicio de 2021 fue el referente de vacunación en Latinoamérica y en otras partes del mundo, tiene vacunados a más del 74 por ciento de su población y cerca del 70 por ciento de aplicaciones son dosis completas.
Canadá mientras tanto ocupa el sitio ocho del top ten mundial con más del 70 por ciento de vacunación entre su población integrada por un poco más de 38 millones de persona; el gobierno de Trudeau fue duramente criticado por haber acaparado millones de dosis (algunos cálculos sitúan la compra en más de tres veces lo que se necesitaba) en plena crisis de la pandemia.
Finalmente, Irlanda y Bélgica cierran la lista, con más del 65 por ciento de esquemas completos de un total superior del 70 por ciento de vacunados en ambos países. La diferencia entre ambos radica en el número total de pobladores, mientras Irlanda cuenta con poco más de 5 millones de habitantes, Bélgica tiene más de 11 millones.
¿Y México?
Entre los lugares 11 al 20 aparecen países como el Reino Unido con el 70 por ciento de su población vacunada con al menos una dosis, Estados Unidos que ha hecho lo posible por revertir los terribles números que lo han puesto en el primer sitio a nivel mundial de fallecimientos por Covid-19, cuenta con apenas el 60 por ciento de vacunados con al menos una dosis y poco más del 51 por ciento de esquemas completos, algo impensable para una aplicación cercana a los 358 millones de biológicos.
México se encuentra en estos momentos en el sitio 19 a nivel mundial, con poco más del 43 por ciento del total de su población integrada por más de 127 millones de habitantes, de ese porcentaje, casi el 24 por ciento tiene esquema completo, el restante cuenta con la menos una dosis, casi 80 millones de vacunas.
Los últimos sitios de la lista son ocupados por Tanzania y Nigeria, el primero con apenas el 0.37 por ciento de la inoculación de esquemas completos, y Nigeria con apenas el 1.24 por ciento y un 0.69 por ciento de esquemas completos.
Con información de Our World in Data