Un increíble descubrimiento es el que hicieron psicólogos de la Universidad de Hull, en Inglaterra, quienes concluyeron que los delfines nariz de botella han desarrollado rasgos de curiosidad, sociabilidad, extraversión y amabilidad, como si fueran humanos.
Los expertos estudiaron a 134 delfines nariz de botella en ocho países en casi una década; publicaron sus resultados en el Journal of comparative Psychology.
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Aseguraron que se sabe que los primates tienen rasgos de personalidad similares a las personas, pero que el que los delfines posean patrones similares es más que curioso, pues se desarrollan en ámbitos completamente diferentes que los primates y los humanos; además, su último antepasado en común se remonta hasta los 95 millones de años.
Detallaron que también se percataron que los delfines nariz de botella viven en comunidades, cuyo tamaño y la composición de su grupo cambian con frecuencia durante la vida de los miembros, al igual que en las sociedades humanas.
Los investigadores aclararon que sus hallazgos aún no son concluyentes y que sólo son el inicio para entender las personalidades de los delfines, lo cual podría arrojar también más información acerca de los procesos evolutivos por los cuales los homínidos pasó para llegar a lo que somos ahora.
Los delfines nariz de botella se observaron en diferentes instalaciones en ocho países, incluyendo México, Francia, Estados Unidos, Curazao, Países Bajos, Suecia, Bahamas y las Islas Caimán.
Su hipótesis
Algunas de las conclusiones de los expertos es que tanto los delfines, como muchos primates tienen cerebros que son considerablemente más grandes de lo que sus cuerpos requieren para las funciones corporales básicas, por lo que este exceso de materia cerebral mejora su capacidad de ser inteligentes.
msb