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Bukele: lo que usted diga don Trump

Hasta el momento, los 255 migrantes enviados a El Salvador han sido recluidos en el Centro de Confinamiento del Terrorismo, la megacárcel convertida en símbolo de la guerra de Bukele contra las pandillas, pero también un centro de tortura

Bukele: lo que usted diga don Trump
Foto: El Heraldo de México

El regreso de Donald Trump al poder en Estados Unidos significó un cambio para el mundo, para la mayoría malo, aunque no para todos. Es el caso del mandatario salvadoreño Nayib Bukele, quien no era bien visto por la administración de Joe Biden, pero ahora se ha convertido en uno de los principales lacayos del nuevo gobierno estadounidense.

La relación de Bukele con los Trump no es nueva. En febrero del año pasado el presidente salvadoreño asistió a la Conferencia de Acción Política Conservadora, la principal reunión anual de líderes y activistas de la derecha en Estados Unidos, que tiene como principal referente al mandatario estadounidense.

De hecho, Donald Trump Jr. asistió a la ceremonia de investidura del segundo mandato de Bukele, hoy el carcelero estrella del magnate, porque está dispuesto a recibir a todos los migrantes expulsados que le mande EU y tratarlos como solo él sabe, léase, maltrato y abusos a todos sus derechos humanos.

En la reciente camada de 17 migrantes expulsados y enviados a El Salvador, según EU miembros del Tren de Aragua, que le envió Trump junto con una lluvia de agradecimientos al mandatario salvadoreño, Bukele contestó: “Adelante juntos”.

Hasta el momento, los 255 migrantes enviados a El Salvador han sido recluidos en el Centro de Confinamiento del Terrorismo, la megacárcel convertida en símbolo de la guerra de Bukele contra las pandillas, pero también un centro de tortura.

Es tan grande el servilismo de Bukele que se burló del juez estadounidense que ordenó sin éxito que se suspendieran los vuelos a El Salvador, publicando en la red social X: “Uy… demasiado tarde”, con un emoticon de risa. Trump dio las gracias a su par salvadoreño, diciendo: “¡No olvidaremos!”

El papel de El Salvador en la estrategia de deportación masiva del gobierno de Trump señala un nuevo nivel de poder y visibilidad mundial para Bukele, quien se convirtió en presidente a los 37 años y fue reelecto por una amplia mayoría en 2024, bajo una oscura interpretación de la Constitución salvadoreña.

Es verdad que Bukele es hoy por hoy el dirigente más popular de América Latina por su lucha contra las pandillas o maras, aunque eso represente la suspensión de libertades civiles fundamentales. 

Ha sido acusado por fiscales estadounidenses de negociar en secreto con esas mismas pandillas. Pero nada de eso importa, Bukele cuenta hoy con el aval de Trump, al grado que se codea con el círculo más cercano del magnate.

Recientemente se reunió con el maquiavélico Elon Musk en una planta de Tesla, en Texas, y recibió la visita en San Salvador del secretario de Estado, Marco Rubio.

Atrás quedó el trago amargo que vivió con la administración Biden, donde incluso no se quiso reunir con el enviado estadounidense para Centroamérica, Ricardo Zúñiga, en aquel entonces reclamando que El Salvador no fuera etiquetado en el llamado Triángulo Norte.

Por eso, mientras la mayoría en el mundo se truenan los dedos por las barbaridades que anuncia Trump casi a diario, la fórmula que catapulta a Bukele es: Lo que usted diga señor Trump. "Adelante juntos”.

POR ISRAEL LÓPEZ GUTIÉRREZ

COLABORADOR

@PAPADEPONCHO

ISRAEL.LOPEZ@ELHERALDODEMEXICO.COM

 

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