TIERRA DE NEGOCIOS

¿Cómo cierra la producción de granos en México?

Estas circunstancias obligaron a la dependencia rectora del sector primario, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, a redoblar esfuerzos y focalizar apoyos en las regiones mayormente afectadas

OPINIÓN

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Mariana Otero-Briz / Tierra de Negocios / Opinión El Heraldo de México
Mariana Otero-Briz / Tierra de Negocios / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: El Heraldo de México

La agricultura es una de las principales actividades productivas que depende en mayor medida de las condiciones climáticas y, desgraciadamente, México no ha tenido las mejores en los últimos dos años.

Recordará que a principios de este 2024 vivimos un intenso calor y altas temperaturas en las ciudades, así como sequías severas en algunas regiones del país, las cuales afectaron la cosecha de varios productos del campo, como el maíz, y golpearon la actividad ganadera.

Estas circunstancias obligaron a la dependencia rectora del sector primario, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, a redoblar esfuerzos y focalizar apoyos en las regiones mayormente afectadas.

La buena noticia es que el panorama cambió diametralmente de rostro con una excelente temporada de lluvias que ha llenado la mayoría de las presas del país, lo que beneficiará al ciclo agrícola Primavera-Verano 2024 e incluso, impulsará al menos el siguiente ciclo agrícola.

Ayer, la dependencia a cargo de Víctor Villalobos Arámbula dio a conocer sus expectativas de cierre de producción de granos básicos y oleaginosas (maíz, frijol, trigo, arroz, sorgo y soya) del año agrícola 2024.

Ahora se estima que el volumen será superior en 2.0 por ciento respecto a 2018, al pasar de 36 millones 450 mil toneladas a 37 millones 200 mil toneladas.

Es de resaltar que México mantiene la autosuficiencia en maíz blanco, con un volumen de producción que aumentó de 23.7 millones de toneladas en 2018 a 24.3 millones de toneladas en 2023.

De acuerdo con datos del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) y de la Coordinación General de Agricultura, se estiman también crecimientos en la producción de frijol, arroz y sorgo. 

El primero cerraría 2024 en un millón 300 mil toneladas, ya que las lluvias llegaron a tiempo y no han parado, con lo cual duplicaría el volumen del año previo, afectado por la sequía, y superaría el máximo alcanzado en 2021, de un millón 290 mil toneladas, con lo que se garantiza también la autosuficiencia.

Mientras que la producción de arroz, del que históricamente somos deficitarios, se estima cierre en 290 mil toneladas, lo que implicaría 40 mil toneladas más en comparación con el año previo y, en el caso del sorgo, se esperan cinco millones 10 mil toneladas, superior en 190 mil toneladas respecto al cierre del año anterior.

Respecto a la producción nacional de soya, cuyas importaciones resultan fundamentales para atender las necesidades del país, se prevé cierre el presente año en 350 mil toneladas, 150 mil toneladas más respecto a 2023, mientras que la de trigo se estima finalice en dos millones 700 mil toneladas. 

Así, cierra el primer sexenio de un gobierno de izquierda que trabajó por la autosuficiencia alimentaria, aún con voces en contra y a pesar del cambio climático y de una incertidumbre global propiciada por temas de salud y conflictos bélicos. Su mérito lo tienen las autoridades encargadas de sacar el barco a flote. 

POR MARIANA OTERO BRIZ
@BRIZCOCHO

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