Columna Invitada

El impacto del neoliberalismo en la cultura de la salud

Este modelo ha sido acompañado, a su vez, por una concepción ideológica que ha instalado pautas de conducta y patrones culturales mercantilizadores en todos los ámbitos de la sociedad

El impacto del neoliberalismo en la cultura de la salud
Martí Batres Guadarrama / Columna Invitada / Opinión El Heraldo de México Foto: El Heraldo de México

El neoliberalismo no ha consistido sólo en un conjunto de privatizaciones de empresas públicas. En realidad, como dice la Doctora Juana Suárez Conejero, se trata de "un modelo económico y político centrado en la desregulación, la privatización y la reducción del papel del Estado".

Este modelo ha sido acompañado, a su vez, por una concepción ideológica que ha instalado pautas de conducta y patrones culturales mercantilizadores en todos los ámbitos de la sociedad.

Así, ha transformado pro fundamente la forma en que las sociedades entienden y gestionan la salud.

Desde el neoliberalismo se promovió el desplazamiento del Estado por el mercado como el principal regulador de los servicios de salud. Las reformas neoliberales redujeron significativamente el financia miento público real destinado a la salud.

Al mismo tiempo, concretaron la privatización de diversos servicios médicos integra les al interior de los Hospitales públicos (como los de imagenología, osteosíntesis, hemo diálisis, hemodinamia y anestesia, entre otros).

También llevaron a la subrogación masiva de las atenciones médicas de los usuarios o derechohabientes de las instituciones públicas a em presas privadas de salud, trasladando constantemente recursos públicos a particulares.

Y, por otra parte, impulsa ron la creación de nuevos Hospitales a través de las llamadas asociaciones público privadas, para financiar la operación de establecimientos particulares con recursos públicos.

De la misma forma se institucionalizaron los mecanismos de co-pago (como en México, a través del Seguro Popular) para fortalecer la noción de que todo servicio de salud debe pagarse.

Simultáneamente se alentó la práctica de contratar, mu chas veces desde las oficinas públicas, seguros privados de gastos médicos mayores.

El neoliberalismo generó las condiciones para la expansión de las industrias farmacéuticas y biotecnológicas, mismas que priorizaron la rentabilidad sobre el bienestar general. Y todo ello mientras se abandonaba y precarizaba el sector público de salud.

En consecuencia, la salud se transformó en un bien de consumo, accesible para quienes podían pagar por ella.

Las aseguradoras, los Hospitales privados y las cadenas farmacéuticas dominaron el panorama.

El enfoque curativo y la responsabilidad personal se convirtieron en la cultura dominante de los sistemas de salud. Lo importante no era prevenir y cuidar la salud co lectiva sino pagar medicamentos, tratamientos, procedimientos y operaciones costosas. Es momento, mientras se rescata el sector público, de impulsar el enfoque preventivo. No esperar la enfermedad para pagar la curación, sino evitar la enfermedad y, con ello, los altos costos de la curación.}

POR MARTÍ BATRES GUADARRAMA

DIRECTOR DEL ISSSTE

PAL

Temas