COLUMNA INVITADA

Retrofit: el verdadero Transformer

Este proceso tiene un impacto significativo en la economía circular, muy parecido a la propia película de Transformers, donde los “fierros” viejos se reutilizaban para crear algo nuevo y más sostenible

OPINIÓN

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Itziar Gómez / Columna invitada / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

El “retrofit” es el verdadero “Transformer” de la sostenibilidad en esta revolución que estamos viviendo hacia la movilidad. Así como Optimus Prime se transformaba de un camión a un formidable autobot, la modernización de los vehículos eléctricos implica convertir los vehículos tradicionales con motor de combustión interna (ICE) en vehículos eléctricos. Este proceso tiene un impacto significativo en la economía circular, muy parecido a la propia película de Transformers, donde los “fierros” viejos se reutilizaban para crear algo nuevo y más sostenible. 

El “retrofit” o la modernización de vehículos no está exenta de desafíos. Se trata de la sustitución del motor de combustión interna por un motor eléctrico y la integración de un sistema a base de baterías, el cual contempla la estructura del vehículo, la distribución del peso y los sistemas de seguridad. 

Los beneficios ambientales de la modernización son similares a la misión de los autobots de proteger la Tierra. Al convertir vehículos ICE en vehículos eléctricos, reducimos las emisiones de gases de efecto invernadero, la contaminación y la dependencia de combustibles fósiles. Esto no solo mitiga el cambio climático, sino que también mejora la calidad del aire y reduce deshechos.

A la cabeza de la tecnología “retrofit” se encuentran países como Alemania, Estados Unidos y China, quienes invierten mucho en investigación y desarrollo para perfeccionar los procesos de modernización y ampliar su adopción, así como en impulsar a startups que están poniendo en práctica estas tecnologías. 

De hecho, la Unión Europea tiene el objetivo de convertir 100,000 automóviles en 5 años y algunos especialistas consideran que alcanzaremos 10 millones a nivel mundial de aquí a 2035. En Estados Unidos ya hay una oferta amplia que transforma los Fiat 500 y Mini de ICE a vehículos eléctricos.

De acuerdo con Precedence Research, el tamaño del mercado mundial de sistemas de “retrofit” para vehículos eléctricos se estimó en 61,680 mdd en 2022 y se espera que alcance alrededor de 125,000 millones de dólares en 2032.

Si bien es cierto que nuestro país mantiene un liderazgo en la fabricación de componentes automotrices y presencia de armadoras globales, el mercado de “retrofit” aún es limitado. México enfrenta grandes desafíos, sin embargo, los tratados internacionales que impulsan la economía circular y nuestro mercado interno nos brindan oportunidades extraordinarias en la transición hacia esta tendencia de economía circular. 

Hace un par de semanas tuve la oportunidad de asistir a un evento en el cual se llevó a cabo el primer recorrido oficial de un vehículo “retrofit” —una camioneta de carga modelo 2010— ya emplacado y con los permisos necesarios para circular, el cual fue transformado por la compañía estadounidense de “retrofit” Evolectric, misma que cuenta ya con oficinas en nuestro país.

Al respecto, Laura Barrera, Directora de Intertraffic México, evento líder de movilidad en México y América Latina, a quien tuve el privilegio de entrevistar acerca de la tendencia del “retrofit”, comentó que la adopción de estas nuevas tecnologías juega un papel relevante en la industria de la electromovilidad en México. Hoy en día, el adquirir un vehículo eléctrico nuevo, en especial de carga, resulta muy costoso. Este tipo de tecnologías nos ofrecen alternativas en el camino hacia la electromovilidad. Convierten en cuestión de días un vehículo de combustión cuya vida útil se encuentre próxima a su final, a un eléctrico, brindando una solución sostenible y a un menor costo, que contribuye a transitar a las cero emisiones.

De igual forma, citó el caso de Europa, donde en 2022 Grupo Stellantis, uno de los principales fabricantes de automóviles y proveedores de movilidad en el mundo, firmó un acuerdo con la empresa de “retrofit” Quinomic con el objetivo de convertir vehículos comerciales ligeros con motor de combustión interna en sistemas de propulsión eléctricos, extendiendo así su vida útil para continuar con sus operaciones. 

Respecto a nuestro país, si bien contamos con estímulos fiscales para el pago de tenencia y verificación ambiental establecidos por el gobierno, aún enfrentamos retos en la evolución hacia la electromovilidad, siendo uno de los principales el desarrollo de una red de infraestructura adecuada y suficiente para satisfacer la demanda.

Laura Barrera me comentó también que, en el marco de Intertraffic México 2023, se reunirán especialistas nacionales e internacionales que abordarán los retos y oportunidades de la movilidad sostenible. Del 17 al 19 de noviembre, en el Centro Citibanamex, se presentarán los avances, casos de éxito, así como las posibles soluciones que favorezcan a resolver desafíos en materia de infraestructura, seguridad vial, estacionamientos, movilidad inteligente y gestión del tráfico, entre otros. 

En resumen, el “retrofit” en el mundo de los vehículos eléctricos es como una transformación cinematográfica: convertir lo ordinario en extraordinario. Encarna los principios de la economía circular y crea soluciones sostenibles a partir de los recursos existentes. Si bien los desafíos persisten, el “retrofit” es un paso esencial hacia un futuro más limpio y sostenible, muy parecido a la búsqueda de Optimus Prime para proteger nuestro planeta de las fuerzas de la oscuridad.

POR ITZIAR GÓMEZ JIMÉNEZ

DIRECTORA DE AGENCIA DE COMUNICACIÓN PLASMAR
 

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