COLUMNA INVITADA

Bloqueo a Cuba: ¿quién no entiende?

En días pasado asistí a una reunión regional del Foro de Sau Paulo celebrada en Cuba

OPINIÓN

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Benjamín Robles Montoya / Columna Invitada / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

En días pasado asistí a una reunión regional del Foro de Sau Paulo celebrada en Cuba, con motivo del Encuentro Internacional de Solidaridad con Cuba, marco para exigir el cese al bloqueo que EE.UU. mantiene contra el pueblo y gobierno de la isla, desde hace más de 62 años.

“Ustedes tienen un pueblo luchador. Un pueblo luchando por mantener su Revolución, enfrentando con valentía un cruel bloqueo por parte del gobierno que se cree el sheriff del mundo. Por eso los admiro y los respeto”, le reconoció al pueblo hermano de Cuba la gran cantante mexicana Eugenia León.

No puedo menos que estar de acuerdo con ella.

Si hay un lugar donde los seres humanos han decidido jugarse la vida en pos de sus ideales a pesar de adversidades económicas, políticas y militares, ese es la isla de Cuba, cuya lección de dignidad sigue vigente en nuestros días.

Una lección, por cierto, poco aprendida y escuchada por otras naciones, que en cambio han perdido hasta el último ápice de dignidad en el camino, entregándose en todo o casi todo a los designios de los poderosos del mundo.

Por que se critica mucho a Cuba por sus carencias y limitaciones, pero quien lo hace seguramente se deja llevar por lo que difunden parcialmente medios afines a aquellos intereses dominantes, o bien, proceden sin darse cuenta de que esas carencias y limitaciones son quizá aún más lacerantes en sus comunidades de origen.

Es decir, critican desde la ignorancia o desde el entreguismo consecuente.

Y ¿quién es peor? Aquel que defiende sus ideales, su nación y aún su dignidad, sabiendo que le va la vida en ello, o bien, aquel que ni si     quiera se da cuenta que le están viendo la cara, viviendo en un país en indignas condiciones, y que asume la defensa de un sistema injusto.

Injusto, además, por donde y cuando se mire. Pues ya el mero hecho de nacer, le significa a un ser humano más un gasto que una ganancia en algunos de esos países.

En México, por ejemplo, recuerdo haber leído un estudio del Senado en el que se concluía que, a consecuencia del periodo neoliberal, una niña o un niño mexicano desde que nace ya debe más de 70 mil pesos de deuda pública

En Europa, de acuerdo a un informe de la Conferencia Española de Organizaciones de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios (CEUCCU),  criar un niño o niña durante sus primeros 3 años de vida, representa un gasto de 42,588 euros, unos 916 mil pesos mexicanos. En los cálculos realizados, ello es casi un 80% del salario mensual neto de un trabajador en España.

Si eso no es explotación autorizada, permitida, asumida, entonces ya es que se ha perdido por completo la dimensión de las cosas y, peor aún, se ha aceptado en los hechos una especie de esclavitud al mercado y al consumo que, lo menos, pone en duda la salud mental de la humanidad de nuestro tiempo.

¿Quién en su sano juicio pretende que los seres humanos de este planeta vivamos en un sistema como éste y seamos esclavos económicos para toda la vida?

Pues hay quien y quiénes y lo hacen a través de todas las herramientas que tienen a su alcance, incluyendo el bloqueo económico, lo que no es más que una expresión de poder, ya anquilosada y anacrónica, perteneciente a una época del planeta que debe darse por concluida.

Lo único que ese bloqueo ha logrado es demostrar que una nación puede resistirlo todo cuando cree profundamente en sus ideales. Claro, a costa de tremendas consecuencias, las cuales pueden resultar un crimen humanitario y del que solo son responsables quienes ejercen el bloqueo y no quienes lo padecen.

Que sea abra el bloqueo, que se abran los ojos de una vez por todas.

POR BENJAMÍN ROBLES MONTOYA
DIPUTADO DEL PT
@BENJAMINROBLESM

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