Chutzpah. Es una palabra hebrea que carece de una traducción específica al español, pero que incluye las ideas de insolencia y audacia.
En EU, es definido como la situación del hombre que asesina a su padre y a su madre, pero luego pide clemencia del jurado porque es huérfano.
Podría ser una característica de populistas que hoy ocupan la Presidencia en muchos países. Siempre en busca del gesto que les dé popularidad y listos a culpar a alguien de sus errores.
Eso es lo que "afecta" al presidente ruso Vladimir Putin. Y de paso muchos de los populistas. El caso de Putin, es especial. Hace un par de días denunció a Ucrania por terrorismo, luego de un atentado que semidestruyó un puente –orgullo de Putin– entre el territorio ruso y Crimea.
Al margen de que pueda tener razón, la actitud es verdaderamente chutzpah. El lunes, Rusia bombardeó ciudades ucranianas con proyectiles dirigidos.
El gobierno de Putin lanzó en febrero último una invasión a Ucrania que llegó de hecho a las inmediaciones de Kiev y aunque las tropas rusas fueron obligadas a retroceder ahí avanzaron en otras zonas y se apoderaron de miles de kilómetros cuadrados en las regiones occidental y costera.
Con el pretexto de defender a Rusia de la posible amenaza militar de la OTAN. El gobierno ruso, que no ha declarado la guerra sino la define como una "operación especial", ha sufrido miles de muertos en su no-guerra.
Todo esto se ha desarrollado en territorio de Ucrania, no en territorio ruso.
El sabotaje del que se quejó ocurrió en un puente que comunica territorio ruso con una región que fue ucraniana hasta 2014, cuando fue conquistada por Rusia y formalizada como república independiente luego de un plebiscito cuestionado por sus circunstancias, como los realizados el mes pasado en los territorios ocupados por fuerzas rusas.
Destrozos ocurren en ciudades y poblados ucranianos. Los muertos civiles son ucranianos en su inmensa mayoría. Y la queja por terrorismo es rusa.
La realidad nunca es tan clara como se cree y la verdad es la primera baja de una guerra. Pero deveras señor Putin ¡que chutzpah!
POR JOSÉ CARREÑO FIGUERAS
JOSE.CARRENO@ELHERALDODEMEXICO.COM
@CARRENOJOSE1
MBL